Jóvenes impulsan consumo de vino en Estados Unidos

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Las ventas de vino de calidad de más de 20 dólares (15 euros) en el mercado estadounidense han experimentado una recuperación durante el 2010, de acuerdo con un estudio realizado por la consultora Nielsen. En el análisis se toma como referencia el período comprendido entre diciembre del 2009 y el mismo mes del 2010, en el que se registró un crecimiento del 11% de las ventas de vino de calidad, mientras que las de caldos con un precio inferior a tres dólares (2,20 euros) retrocedieron un 0,6%. Uno de los factores determinantes que avalan esta tendencia positiva en el consumo es la entrada al mercado de las generaciones jóvenes a partir del 2000. Este grupo, que actualmente representa a 50 millones de personas y que crecerá en los próximos cinco años en 25 millones más, posee unos niveles de consumo más elevados que las generaciones precedentes y demanda un producto de mayor calidad. La estrategia comercial para llegar a estos nuevos consumidores pasa por la utilización de las nuevas tecnologías, según las palabras de Jay Wright, presidente de la división norteamericana del grupo bodeguero Constellation. La instrumentación de las redes sociales o YouTube resulta fundamental para acceder a unas generaciones de consumidores que utilizan canales de comunicación muy distintos de los de sus predecesores. Pero esta tendencia que se observa en el consumo de vino no es sólo privativa de los jóvenes estadounidenses. Algo similar ocurre en otros mercados, que apuntan a ser uno de los motores del consumo de vino en los años venideros como es el caso de China. Allí, una nueva generación de jóvenes eligen beber vino porque, según dicen, está de moda y es elegante. Dentro de las preferencias de este grupo asiático aparece el vino tinto, que es consumido en oportunidad de fiestas con amigos o en cenas de negocios. De esta manera, esta bebida se está convirtiendo en un nuevo medio de socialización en China, según una publicación de China Daily. En opinión de Irene Cai, de AT Kearney, “los jóvenes en China intentan imitar el ritmo de vida occidental y por ello beben vino fundamentalmente en restaurantes y fiestas, pero cada vez se lo toma más en casa también”. A pesar de un crecimiento superior al 10% en los últimos años, el consumo per cápita de vino en China es de 0,4 litros, lo cual es muy poco en comparación con otros países (en Francia es de 50 litros por persona al año, en Australia de 25 y en Estados Unidos de 15). En esos números de consumo de vino en el mercado chino, que por ahora son considerados pobres, radica el enorme potencial que tiene el país asiático para la industria vitivinícola mundial. (Fuente: icex.es / www.circulodelvino.com)