Kirchner pide al BM que suspenda créditos a pasteras

Le envió una carta al titular del organismo. Afirmó que el banco debe tener neutralidad.

BUENOS ARES.- El gobierno argentino decidió apuntar su ofensiva hacia el Banco Mundial para pedir que se «suspenda» la decisión inminente sobre la liberación de los créditos para la financiación de las pasteras proyectadas en Uruguay, por medio de una carta que el presidente Néstor Kirchner envió al titular del organismo de crédito, Paul Wolfowitz.

Kirchner le pidió al presidente del Banco Mundial que se «suspenda la consideración de toda decisión relativa al financiamiento de cualquiera de la plantas proyectadas» en Uruguay que podría afectar el «principio de equilibrio» frente a la controversia bilateral planteada ante la Corte Internacional de Justicia de La Haya.

La carta del jefe de Estado argentino fue presentada el lines ante el Banco Mundial y sus detalles se conocieron ayer, en momentos en que la secretaria de Medio Ambiente, Romina Picolotti, se encuentra en Washington para mantener reuniones con funcionarios del Banco Mundial que apuntan en la misma dirección.

En el conflicto planteado entre la Argentina y Uruguay existen dos fechas clave: en quince días se reunirá el directorio del Banco Mundial para comenzar a analizar el pedido de créditos a las pasteras, y la Argentina contrapone que recién el 15 de enero presentará ante La Haya la «Memoria» que fundamenta el reclamo del Estado nacional por los efectos contaminantes de las plantas.

Como contexto del conflicto bilateral, además, se cuenta el pedido argentino -aceptado por el presidente de Uruguay, Tabaré Vázquez-, para que el rey de España, Juan Carlos de Borbón, actúe como «facilitador» de un entendimiento entre ambos países, que se acordó en la reciente Cumbre Iberoamericana en Montevideo.

La vicepresidente del Banco Mundial, Ana Palacio, señaló que en alrededor de 15 días el Consejo del organismo iniciará el análisis del pedido de financiamiento presentado oportunamente por las empresas Botnia (Finlandia) y Ence (España), aunque la segunda planta está en proceso de relocalización sin precisiones sobre el nuevo emplazamiento.

Por su parte, Picolotti acusó ayer a la Corporación Financiera Internacional (CFI) de «negligente» y de «agravar el conflicto» entre Argentina y Uruguay por la instalación de plantas de celulosa en Fray Bentos.

«Argentina tiene una relación histórica con Uruguay que ha sido realmente dañada a raíz de la conducta de la CFI», aseguró Picolotti en declaraciones al diario británico Financial Times.

En ese sentido, la funcionaria acusó a la entidad del Banco Mundial de actuar «como si fuera socia de las corporaciones» que desean invertir en Uruguay. «La negligencia de la CFI ha agravado profundamente el conflicto de Argentina con Uruguay», dijo Picolotti. (DyN/Télam)


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