Kirchner relanzará su gestión con aumentos a estatales y jubilados

BUENOS AIRES (ABA).- El presidente Kirchner anticipó a un grupo de seguidores que en mayo, en ocasión de celebrarse el primer año de gestión, hará anuncios importantes que contemplan mejoras salariales a los empleados públicos y el incremento del mínimo para los jubilados y pensionados.

Entusiasmado con el descenso progresivo del desempleo en los últimos once meses, Kirchner alentó a sus visitantes, Osvaldo Nemirovsci, de Río Negro, Alfredo Fernández, de Mendoza, José Mongeló, de Chaco y Rubén Daza, de Jujuy, a seguir trabajando dentro del Partido Justicialista, lo que fue interpretado por los diputados como una clara señal de la «tregua» alcanzada con Eduardo Duhalde y del «agotamiento» del proyecto de transversalidad, alentado por sectores progresistas no encuadrados en el peronismo.

«El PJ es un terreno que no se puede abandonar. Por primera vez, tenemos a un peronista que le gusta a los porteños y al que podemos mostrar con orgullo. ¿Cómo, entonces, nos vamos a pelear con el peronismo?», planteó un importante dirigente de la capital federal, también presente en esa reunión entre los legisladores y Kirchner.

En el encuentro en el que Kirchner alentó a los suyos a que «sigan sumando dentro del PJ», se reconoció que entre el patagónico y Duhalde «hay un choque en la forma de mirar a la política, pues el Presidente descarta la idea del aparato más aparato», no obstante lo cual se convino en que «no es posible liberar los demonios en Buenos Aires» sin afectar la gobernabilidad.

En la actualidad, la totalidad de los diputados nacionales por ese distrito responden a Duhalde. La «pipa de la paz» que fumarían éste y el Presidente, determinaría que en 2005, el kirchnerismo se reservará por lo menos un cuarto del poder territorial.

Nemirovsci, Fernández, Mongeló y Daza se fueron de la entrevista, de unos 15 minutos, con la impresión de que Kirchner no está dispuesto a competir por la titularidad del PJ, vacante tras el estrepitoso último congreso de Parque Norte. Dejaron trascender, además, que el Presidente sigue molesto con el gobernador de Córdoba, José Manuel De la Sota, y revelaron que pidió un apoyo parlamentario contundente para el plan nacional de seguridad que lleva adelante el ministro Gustavo Beliz.

«Es un paso adelante para debatir», insinuó el rionegrino Nemirovsci.

«Es mucho más que eso, este plan va a andar muy bien», contestó Kirchner, quien tuvo palabras respetuosas hacia Juan Carlos Blumberg, el padre del asesinado adolescente Axel, a quien elogió por su mesura.

Los interlocutores del jefe de Estado quisieron saber que pasará con los festejos del 25 de mayo. Kirchner no contestó directamente. Algunos de sus colaboradores dijeron que ese acto en Plaza de Mayo «está suspendido». Otro secretario de Estado, consultado por esta agencia, manifestó textualmente: «La idea es hacer una fiesta Patria, no partidaria ni política, con participación popular y música, igual que el pasado 9 de julio. Las acciones del gobierno y Blumberg – aclaró – no son contradictorias».

Ayer, en la Rosada preparaban herméticamente la agenda del viaje presidencial a Nueva York, de la semana próxima. Esa incur

sión por Estados Unidos contemplaría un estudio médico, tras la gastroduodenitis que lo afectó hace más de dos semanas y lo obligó a internarse de urgencia en un hospital de Río Gallegos.

Anoche, voceros duhaldistas aceptaron que de hecho existe una «tregua» entre su jefe y Kirchner, pero transitoria hasta junio. Sin embargo, uno de los dirigentes que le lleva las carpetas al santacruceño, dijo a «Río Negro» que Duhalde «tiene la oportunidad histórica de pasar a la historia, poniéndose por arriba de las peleas menores que puede haber….No está previsto un encuentro entre ambos, pero tampoco lo descartamos».

Arnaldo Paganetti

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