Kirk Douglas, una leyenda recibe su Oso de Oro

Berlín (Télam-SNI).- El veterano actor estadounidense Kirk Douglas, uno de los más populares de Hollywood, será distinguido hoy en el 51 Festival Internacional de Cine de Berlín con un Oso de Oro honorífico por su trayectoria.

Según los organizadores de la Berlinale, Douglas “dio vida a mitos tenaces, enérgicos y fuertes del pasado y del presente. Interpretó a aventureros, cowboys, policías, estafadores y gángsters revelándose como un actor extraordinario. Hace tiempo que se convirtió en una leyenda del cine”.

Destacan además que junto a su trabajo en la pantalla grande, “es una personalidad que se comprometió con la sociedad y con los ideales democráticos de América”, como cuando insistió en contratar al guionista Dalton Trumbo para “Espartaco” y mantener su nombre en los títulos, a pesar de que figuraba en la “lista negra” del anticomunista senador McCarthy.

Kirk Douglas nació en 1916 como Issur Danielovitch Demsky en Amsterdam, una ciudad industrial del estado norteamericano de Nueva York. Pocos años antes, sus padres, judíos rusos, habían huido del hambre y la persecución en su patria.

Creció con seis hermanas y fue un alumno tan aplicado que sus padres pensaron en convertirlo en rabino, pero él quería ser actor y con el nombre americanizado de Isadore Demsky asistió a la prestigiosa Academia Americana de Artes Dramáticas en Nueva York.

Al comienzo de su carrera cambió su nombre por el de Kirk Douglas, en parte como reacción a las posturas antisemitas que estaban extendidas en los Estados Unidos, y fue una antigua compañera de estudios, la magnífica Lauren Bacall, la que en 1945 lo llevó a Hollywood.

El gran éxito le llegó en 1949 con el papel de un boxeador en “Champion”, de Max Robson. Desde entonces se especializó en caracteres fuertes y apasionados, que luchan por su libertad individual.

Douglas maduró hasta convertirse en el héroe sucio y convenció como brutal productor cinematográfico en “Cautivos del mal” (1952), de Vincent Minnelli, y como “El discípulo del diablo” (1959), en la película de Guy Hamilton. Rodó entre otros a las órdenes de Jacques Tourneur, Joseph L. Mankiewicz, Billy Wilder, William Wyler, Howard Hawks, Stanley Kubrick, Otto Preminger, Elia Kazan y Brian de Palma.

Estuvo nominado al Oscar tres veces y en 1996 la Academia de Hollywood lo distinguió con un premio honorífico, por su obra cinematográfica extraordinaria y su integridad humana.

Como productor, incentivó a guionistas y directores jóvenes, por ejemplo, a Stanley Kubrick, a quien le financió la película que se exhibirá hoy en su honor, “Senderos de gloria” (1957), en la que interpretó además el papel principal. Una segunda colaboración con Kubrick, “Espartaco” (1960), se convirtió en éxito internacional.