La comuna volvió a multar a la CEB

SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- La empresa de correo privado que conformaron varios ex sindicalistas de Luz y Fuerza para prestar servicios a la CEB recibió hace pocos días una nueva acta de infracción municipal por ejercer actividad comercial sin ninguna habilitación.

Es la sanción que le aplican por el mismo motivo, pese a lo cual sigue sin regularizar su situación ante el municipio. La conducción de la firma «Correo Limay» es ejercida por dos empleados de la CEB que a su vez fueron durante años dirigentes de Luz y Fuerza hasta que perdieron la última elección.

Su condición de contratistas de la Cooperativa fue muy cuestionada por los actuales directivos del gremio, que volvieron a quejarse esta semana por la falta de «transparencia» de los sindicalistas mutados en empresarios.

El acta de infracción confeccionado por el inspector de Fiscalización Ambiental Rubén Guzmán y da cuenta de que la empresa Corre Limay carece de habilitación comercial.

También señala que la firma no tiene permiso de publicidad y propaganda en vehículos, pese a lo cual su personal se moviliza en dos Fiat Duna con publicidad en las puertas delanteras.

Las actuaciones fueron realizadas en la vivienda sin carteles donde funciona el peculiar emprendimiento, ubicada en Rivadavia 663, a pocos metros del corralón municipal.

Pero el acta señala como irregularidad adicional que el sello fechador de Correo Limay menciona la dirección de Anasagasti 243, donde en realidad se encuentra la sede de Luz y Fuerza. Esto significa que la actividad de la empresa se superponía con la del gremio hasta que sus directivos anteriores perdieron la última elección.

La empresa de correo privado tiene cedido por contrato desde abril de 2002 la tarea de lectura de medidores y distribución de facturas de la CEB, por la que cobra una suma cercana a los 38.000 pesos mensuales.

Los ex sindicalistas a cargo de la firma son Jorge Lagos y José Luis Mansilla. Pero la nueva conducción sindical viene objetando la condición paralela de empleados y contratistas que tenían Lagos y Mansilla, pero pasado el tiempo todo sigue igual.

La tercerización de la toma de estado de medidores es una «herencia» de la gestión anterior de la CEB, encabezada por Leonardo De Ferrariis, que sus sucesores consideran «insólita» porque no existen otras empresas de servicios públicos que dejen esa delicada tarea en manos ajenas.