La construcción en Neuquén retorna a los niveles de ocupación plena
La demanda crece paulatinamente y llega casi al 90%.
NEUQUEN (AN).- La recuperación de los niveles de empleo de la construcción en la provincia atraviesa su mejor momento en mucho tiempo. Los registros de la actividad formal -con libreta de fondo de desempleo- indican una ocupación que ronda entre el 85 y el 90%, pero la informal estaría en índices superiores.
A falta de estadísticas oficiales, el gremio y los empresarios se basan en indicadores tales como la falta de mano de obra especializada y, en el caso de la zona turística, la nula disponibilidad de personal.
«Cuando afrontamos períodos de crisis económica, nuestro sector es el primero que sufre el impacto y en contraposición, cuando el panorama mejora, es uno de los primeros en recuperarse», señaló Julio Ojeda, al frente de la delegación local de la Unión Obrera de la Construcción (UOCRA), quien no obstante aludió al rol que juegan los planes de empleo para captar aquella franja de trabajadores que por diversos motivos -discapacidad física, edad avanzada-, no son absorbidos por las empresas.
Para el presidente de la Cámara de la Construcción, Juan Bialous, «la ocupación ha registrado una sensible mejoría». Precisó que si hay sobrante de mano de obra se trata de las categorías de auxiliares y ayudantes, pero a la vez señaló que «hay déficit en las especializadas».
Se trata, estas últimas, de aquellos oficiales que hacen paredes de ladrillo visto; colocan piedras de revestimiento, cerámicos y azulejos; los que hacen pisos de diversos tipos; colocadores de
sanitarios; carpinteros; electricistas.
«Si bien debe admitirse algún grado de desocupación, hay que tener en cuenta aquella franja de personal que no pasa el examen médico preocupacional. Pero indudablemente hay una importante recuperación de la ocupación formal y, en el caso de la informal, es mayor aún», dijo Bialous.
La discapacidad más habitual está dada por problemas de lumbalgia y vista, entre otros factores, y afecta a hombres de 40 años en adelante.
En el ámbito formal -planes de viviendas, obras públicas-, el dirigente señaló que en los últimos meses se ha verificado un «freno», pero aún así es muy alto. «Con todo, todavía estamos a un 30% de los niveles de actividad del '98», comentó.
Bialous advirtió que no manejan datos estadísticos -aún cuando podrían elaborarse ya que los datos están en diversos organismos públicos y sólo habría que cruzarlos-, pero dijo que hay elementos objetivos que permiten observar la recuperación del sector.
La reactivación del sector se traduce la realización de obras particulares, que mayoritariamente están a cargo de constructores y albañiles que engrosan el renglón informal. Son construcciones de una vivienda, pasando por los quinchos, las reformas y las ampliaciones.
Respecto de la oferta laboral por zonas, Bialous comentó que en el conglomerado Neuquén-Plottier-Cente
nario, sin dejar de tener cuenta las observaciones hechas, hay ocupación semiplena.
«En San Martín de los Andes, Junín de los Andes y Villa La Angostura, directamente no hay oferta de mano de obra. Si una empresa toma una obra en esos lugares, directamente tiene que pensar en llevar todo el personal», afirmó.
«En general la recuperación de fuentes de trabajo se viene dando desde hace unos meses y este último índice de la Encuesta Permanente de Hogares, para Neuquén, ha sido una confirmación de relevamientos que se venían haciendo», dijo Rubén Vaudagnoto, de la subsecretaría de Empleo.
El funcionario prefirió no aludir a estadísticas porque en muchos casos son parciales y en el caso de Neuquén hay mucha mano de obra temporaria. Sin embargo sí citó que una información de hace un mes, para el conglomerado Neuquén-Plottier-Centenario la desocupación era del 7,9%.
«De hecho que la construcción ha venido evolucionando, como lo demostraron índices de los años 2002 y 2003», señaló Vaudagnoto.
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