La dirigencia radical rionegrina usa dos idiomas en Buenos Aires

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El radicalismo rionegrino sigue enviando señales contradictorias hacia el escenario político nacional. Por un lado, el vicegobernador Bautista Mendioroz se entrevistó ayer con Ernesto Sanz -presidente de la UCR en licencia por su candidatura- y le prometió que el partido en Río Negro se alineará detrás del proyecto nacional. Casi en simultáneo y también en Buenos Aires, el secretario general de la Gobernación, Francisco González, se sentó con el secretario general de la Presidencia, Oscar Parrilli, para ratificarle “el compromiso provincial de seguir consolidando la excelente relación institucional que hemos mantenido primero con Néstor Kirchner y ahora con la presidenta Cristina Fernández”. Sumado a ello, Sergio Wisky -referente directo del flamante candidato a gobernador, César Barbeito- rechazó la advertencia de Ángel Rozas -a cargo de la UCR nacional- por la alineación rionegrina. Le pidió que baje su discurso de “inquisición” y que “ayude a ganar la provincia” para que no pase lo que a él en Chaco, que perdió”. El martes, Rozas había advertido que la UCR nacional no “tolerará acuerdos o alineamientos con el gobierno nacional”. En consecuencia, Wisky recordó que Ricardo Alfonsín en Bariloche declaró que “en política no hace lo que se quiere sino que hace lo que la relación de fuerzas le permite hacer. Llama la atención -agregó- que Rozas desconozca la posición de su candidato y salga a defender la virginidad del radicalismo”. Afirmó que “la mayoría de los radicales del interior intentamos conjugar ética y acción”. Mendioroz mostró otro perfil del mismo oficialismo provincial y le dijo a Sanz que “está claro que el alineamiento de la UCR rionegrina será detrás del candidato a presidente de la Nación que surja de las internas del 30 de abril”. Precisó que “nuestro sector no va a acompañar a ningún acuerdo electoral con el kirchnerismo”. Esas garantías quedaron en duda poco después, cuando a través de una gacetilla oficial se describió la reunión entre González y Parrilli, donde se centró el análisis en los resultados de las últimas elecciones y “se volvió a ratificar la relación entre Nación y Río Negro”. (AV)