“La historia aún no terminó”, avisa Vettel

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AP

La juerga fue intensa: Sebastian Vettel y su equipo, Red Bull, festejaron su tercer título de Fórmula 1 consecutivo como se merecía. Pero no tendrá mucho tiempo para recuperarse de la resaca, porque le esperan muchos compromisos en los próximos días. La sonrisa era algo común en las caras de los miembros de su escudería en el Nobel-Club Villa Mix de São Paulo. Con las típicas caipirinhas en la mano, Vettel, su novia Hanna, y el equipo Red Bull celebraron el éxito hasta la madrugada. “Algunos tendrán resaca”, advirtió aún en el circuito de Interlagos el jefe del equipo, Christian Horner. Todo el estrés y la tensión de la última carrera del año, una de las más locas de la temporada -lluvia, golpes y salidas de pista constantes-, se esfumaron horas más tarde. Mientras el alemán se dormía, los diarios europeos estaban ya en los quioscos. “El niño prodigio imitó a Schumacher y Fangio. Se merece el título de un gran Mundial”, escribió el diario italiano “La Repubblica”. Y “L’Equipe” señaló que Vettel “avanza hacia los gigantes”. La temporada entera y en especial el último GP le costaron a Vettel mucha energía. “Fue mi carrera más dura”, reconoció el piloto de 25 años. El alemán, al que muchos ven en Ferrari, dejó algo claro para el futuro a corto plazo: “Tengo contrato hasta final de 2014. Estoy muy contento con Red Bull. No hay ningún motivo para pensar en otro equipo”, dijo y avisó: “La historia aún no terminó”.