La inflación se aceleró por suba en alimentos
De acuerdo a un informe privado el incremento de precios en carnes, frutas y verduras agudizó el proceso. El Indice de Precios al Consumidor se habría acelerado un 2,4%, según el estudio.
EN OCTUBRE
La inflación se aceleró en octubre al subir 2,4 por ciento el Indice de Precios al Consumidor, impulsada por el encarecimiento de la carne, frutas y verduras. La consultora Ecolatina elaboró un informe en el que destacó que el valor de los alimentos acumula en lo que va del año un alza de 31,7 por ciento. La proyección privada está en línea con las estimaciones de otros analistas, que arrojaron una inflación para octubre que oscila entre 2,1 y 2,8 por ciento. Esta cifra se conoció en medio de la polémica que provocaron las declaraciones del ministro de Economía, Amado Boudou, acerca de que la inflación es una preocupación sólo de los habitantes de la clase media-alta. Los números oficiales serán difundidos por el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC) el próximo viernes, pero se prevé que, tal como viene sucediendo desde principios de 2007, cuando comenzó la intervención del organismo, habrá una enorme brecha con los cálculos privados. Ecolatina remarcó que desde que comenzó el proceso inflacionario, en 2007, los alimentos treparon siempre por encima del nivel general de precios. Este fenómeno “se exacerbó” en 2010 “y el capítulo Alimentos y bebidas acumula un alza de 31,7 por ciento”, indicó el documento. Al mismo tiempo, la consultora puntualizó que ese rubro explica cerca del 60 por ciento (13,3 puntos porcentuales) de la inflación total acumulada en el año. Según el informe, el producto que registró la mayor incidencia dentro de los alimentos fue la carne, que se encareció en lo que va del año 54 por ciento. “Uno de cada cinco puntos de inflación total responde al fortísimo aumento en el precio de la carne”, alertó Ecolatina, y destacó que “el impacto de los alimentos es tan significativo que si se extrajera del cálculo, la suba de precios acumulada en lo que va del año sería 6,7 puntos porcentuales menor”. La consultora advirtió que “el problema radica en que cuando la suba de precios es motorizada por los alimentos, la inflación termina por afectar relativamente más a los sectores de menores recursos”, una situación que frena “la reducción de la pobreza y la indigencia”. Esto es así porque un segmento de la población destina una mayor proporción de sus ingresos a la compra de bienes esenciales. Al respecto, precisó que la carne, frutas y verduras representan más de la mitad del costo total de la Canasta Básica Alimenticia (CBA) que, de acuerdo a sus cálculos, se ubica en 1.157 pesos para un matrimonio con dos hijos, lo cual implica un incremento en lo que va del año de 32 por ciento. Asimismo, estimó que el valor de la Canasta Básica Total (CBT), que define el umbral de la pobreza, alcanza para una familia tipo tipo los 2.317 pesos, y acumuló en lo que va del año un aumento de 27,2 por ciento. “Los picos inflacionarios registrados en 2010, lejos de responder a factores exógenos (como el clima), se derivan de la regulación del mercado vacuno (iniciada en 2006) que terminó por afectar la oferta de carne disparando los precios”, evaluó Ecolatina. Según pronosticó, la contracción de la oferta de carne “se relajará” recién “en el mediano plazo”, debido a que la política ganadera oficial “no sólo agregó incertidumbre sino que evitó corregir el rumbo que se presentaba cada vez más cierto”. “Mientras se desestime a la inflación como problema y se descarte la implementación de una política coordinada para acotarla, la suba de precios continuará elevada con impacto sobre la población de menores recursos”, auguró el informe. DyN.-
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