La influencia de Gio Moreno
juan mocciaro jmocciaro@rionegro.com.ar
“Con Gio Moreno será diferente”, decía Diego Simeone, cuando era inminente el retorno del crack colombiano a la Primera de Racing, tras su larga recuperación de la rotura de ligamentos sufrida en febrero pasado. El tres de septiembre, ante All Boys, el equipo ante el que se lesionó, Moreno jugó sus primeros 31 minutos de fútbol oficial. Era la primera vez que el Cholo podía contar con él y su ilusión de que con él todo iba a ser diferente, por no decir que todo iba a ser mejor, desbordaba sus palabras. Y fue diferente. No tanto ante All Boys, feo empate sin goles. Sí lo fue en la fecha siguiente ante Olimpo, cuando Gio ya fue titular. El triunfo mínimo lo construyó la Academia cuando el colombiano estuvo en cancha. Con él, Racing fue claro, simple y profundo. Supo tener la pelota y qué hacer con ella. Ante los bahienses, Simeone lo sacó a los 17 minutos del segundo tiempo para mandar al campo a Gabriel Hauche y Racing volvió a ser el de antes. Caótico, vertical pero sin rumbo y abrazado por un vértigo improductivo, al mejor estilo Simeone. Gio la da estilo a Racing. Su juego es aplomado y la pelota tiene quién la distribuya. En el muy europeo 4-2-3-1, Moreno es el del medio en esa línea de tres volantes ofensivos. Recostado a la derecha hace jugar a todos soltando su pie derecho. Contra Unión, salió reemplazado por Pablo Lugüercio y la Academia retrocedió a sus peores momentos futbolísticos. No es casualidad que Racing pierde el rumbo y puntos cuando sale del equipo Moreno. Contra Olimpo estuvo muy cerca de no ganar, pero se aferró al 1-0 y se quedó con los tres puntos. Ante Unión, no. El Cholo mandó a la cancha a Lugüercio a los 13 minutos del complemento y once minutos después, el Tatengue lo igualó de penal. Gio le había dado la ventaja con un golazo de tiro libre en el primer tiempo.
río suelto
Registrate gratis
Disfrutá de nuestros contenidos y entretenimiento
Suscribite por $1500 ¿Ya estás suscripto? Ingresá ahora
Comentarios