La institución más antigua de SAO

Ya en 1897 custodiaba las costas de la zona.

La sede de la Prefectura Naval es la institución más antigua con la que cuentan los sanantonienses, y a través de los años no sólo atestiguó su crecimiento y desarrollo sino que experimentó los mismos cambios y vaivenes que vivieron los antiguos pobladores, desde que se constituyó el primer asentamiento poblacional en el Puerto San Antonio Este que derivó en un éxodo hacia San Antonio Oeste sentando las bases de lo que hoy es la ciudad cabecera de la localidad.

En 1897 (cuando la institución surgida a nivel nacional en 1810 ya había comenzado a custodiar las costas patagónicas) afincó su primera sede en la zona de Punta Villarino, para acompañar el incipiente poblado que había comenzado a conformarse en torno a las actividades comerciales que se motorizaban desde allí.

Ya en 1903 junto a esa primera edificación (de la que hoy sólo quedan algunos rastros) se construyó el primer muelle y tuvo lugar su reconocimiento oficial.

En esa época las actividades portuarias no eran las únicas que desempeñaba Prefectura, teniendo en cuenta su significativo valor como institución en el marco de un pueblo en ciernes.

El historiador local Héctor Izco recordó en su libro “San Antonio Oeste y el mar, origen y destino” que “en la fundación del primitivo puerto comercial en el Saco Viejo (hoy Puerto SAE), la Prefectura no sólo desarrolló las actividades propias sino también las policiales y aduaneras”.

Por entonces, sin embargo, las dificultades para el traslado de mercancías, víveres y materiales de construcción que arribaban al lugar en carretas tiradas por bueyes que transportaban los llamados “frutos del país” (lana, cueros y pieles, principalmente) provocaron que los habitantes del Puerto comenzaran a pensar en instalarse en la Caleta Oeste (hoy SAO).

Finalmente en 1905, la firma Sassemberg decidió instalarse en el lado Oeste porque el Puerto se encontraba lejos de la zona donde convergían las actividades comerciales, y el 10 de julio arribó a ese sector inaugurando el éxodo que progresivamente llevaría a toda la población hacia allí, una intensa ‘mudanza’ a la que también se plegaría Prefectura, que con el tiempo iría modernizando el edificio que actualmente ocupa en uno de los sectores de la ría local.

A través de los años, la entidad que acompañó el trajinar de la ciudad y sus habitantes vivió grandes desafíos, como la modernización del Puerto de Ultramar de SAE, que a medida que incorporó la infraestructura que lo convirtió en la terminal de servicios que constituye hoy requirió el desarrollo de la institución, que fue complejizando sus funciones para velar por la seguridad de la navegación, la protección marítima, ambiental y la seguridad pública.

Lo que no varió con el paso del tiempo es su compromiso como institución local, ya que sigue desarrollando acciones de colaboración con otras entidades como escuelas, centros de atención de salud y agrupaciones vecinales.

Textos de este suplemento: Vanesa Miyar

Fotos: Martín Brunella

siempre presentes

Prefectura Naval

Prefectura no descansa en el cuidado de las aguas que su rol implica.


Formá parte de nuestra comunidad de lectores

Más de un siglo comprometidos con nuestra comunidad. Elegí la mejor información, análisis y entretenimiento, desde la Patagonia para todo el país.

Quiero mi suscripción

Comentarios