La Manzana más deliciosa

Acostumbrado a pelear con los mejores del Rally Argentino, el barilochense Nicolás Madero no dudó un minuto cuando le ofrecieron participar en la 43 edición de la Vuelta de la Manzana. Poco le importó que fuera sólo por el regional. Vino a aportar su talento, sabiendo que no la iba a tener fácil, pero como un talentoso que es apostó a su manejo y terminó escribiendo una de las páginas más importantes en la historia de la legendaria prueba que organiza la AVGR. Madero, desde su impecable victoria de ayer, que en nada se desluce porque en el cierre se quedó sin rivales en la renovada Super R, se convirtió en el primer regional que gana la general por segunda vez. Un logro para unos pocos privilegiados en la historia de la Manzana, a la que ahora se sumó Madero, quien pasó a ser el gran candidato desde el mismo momento que en la primera etapa se quedó Raúl A. Martínez, con el que venían palo y palo luchando por la victoria, si bien el reginense estaba adelante desde el súper especial del Paseo del Canal Grande. Dueño de un manejo exquisito, a Madero no le importó que se fueron cayendo sus rivales en la única división de tracción integral que tiene el certamen regional. Encaró la segunda etapa con una buena diferencia con su escolta Carlos Valls, pero no le mezquinó al acelerador. Anduvo a fondo por los polvorientos caminos de bardas de Huergo, Cervantes y Roca que conformaron la segunda etapa, haciendo delirar a los miles de aficionados que respondieron a la convocatoria. Es probable que Madero siga en el regional, aunque con semejante talento es una lástima que no tenga apoyo para encarar desafíos más grandes.