La mitad de la gente tiene ingresos bajos

NEUQUEN Cinco de cada diez personas que trabajan en las cuatro ciudades relevadas cobran por mes menos de 500 pesos y hasta 599 pesos. Se trata de un segmento poblacional considerado de ingresos bajos que llega al 54 por ciento en el promedio general: el 40 por ciento recibe por su trabajo una remuneración inferior a los 500 pesos por mes y un 14 por ciento entre 500 y 599 pesos.

Si se toma individualmente por ciudad, en Zapala esa franja representa el 63 por ciento, el 59 por ciento en San Martín de los Andes y el 56 por ciento Cutral Co, pero se reduce al 49 por ciento entre los que trabajan en la ciudad de Neuquén.

A este sector debe agregársele el 4,7 por ciento de personas que trabajan sin recibir una remuneración fija por estar empleadas en un emprendimiento familiar -kiosco u otro tipo de negocio-.

También en la capital provincial se registra el mayor porcentaje en el nivel medio de ingresos, pues el 41 por ciento percibe un salario que oscila entre 600 y 1.499 pesos por mes.

En San Martín de los Andes ese grupo se reduce al 26 por ciento y en Zapala y en Cutral Co la proporción es aún más baja, pues respectivamente sólo un 22 y 20 por ciento de los asalariados llega a esa cifra.

Una información adicional en este contexto es que en este grupo, sobre el promedio, están representadas personas que ganan entre 600 y 900 pesos, ingresos que -en relación con el costo de la canasta familiar- en realidad no se pueden definir como «de nivel medio».

En el nivel de ingresos medio-alto hay una franja casi totalmente «desértica». Sólo un 4,7 por ciento está en ese grupo, compuesto principalmente por personas radicadas en Neuquén y San Martín de los Andes.

El nivel de ingresos altos -3.000 pesos y más- está integrado por sólo un 1,2 por ciento, que sería aún más bajo si no hubiera en la ciudad lacustre un 5,6 por ciento que se ubica en ese grupo. En las cuatro ciudades relevadas, el 42 por ciento de la población mayor de 18 años es económicamente activa.

En la provincia se observa también algo común en todo el país: muchas personas desarrollan sus actividades en más de un lugar de trabajo recibiendo alguna forma de retribución en dinero.

Un 19 por ciento trabaja en dos y más lugares de trabajo.

La costumbre o más bien la necesidad de trabajar en más de un empleo, caracteriza típicamente a los países con problemas estructurales en la organización de sus economías y donde una franja significativa lucha por su sobrevivencia.