La obra de la calle Mitre avanza con lentitud

La obra de la calle Mitre avanza con lentitud

La expectativa de que la remodelación de la calle Mitre esté lista y entrenada para la temporada estival tiene cada vez menos chances de éxito. Esta semana los obreros comenzaron a colocar vallas y perforar la calzada en la cuadra que va de Rolando a Palacios, la última que permanecía invicta. Pero la empresa contratista sigue sin entregar las primeras, donde los trabajos se iniciaron hace ya nueve meses.

Los comerciantes de la céntrica arteria no paran de quejarse por las demoras y las molestias que ocasiona la obra. “Cuando pusieron las vallas dijeron que era por 45 días y se quedaron cuatro meses”, se lamentó el vendedor de una farmacia.

“Hay cosas que no se entienden -comentó otro, de la esquina de Mitre y Palacios-. El lunes llovía y en esta cuadra eran como 15 trabajando. Hoy tenemos pleno sol y no hay nadie”.

La modernización de la Mitre es una obra proyectada hace más de diez años, y se comenzó a ejecutar en febrero pasado. Tiene un presupuesto de 59,5 millones de pesos y es financiada por el BID. La amortización correrá por cuenta de la provincia y los frentistas no pagarán un solo peso.

El secretario de Gestión Urbana del municipio, Marcelo Ruival, reconoció que hubo un cambio de plazos sobre la marcha y que el último cronograma presentado por la Unidad Ejecutora al municipio y a las cámaras empresarias “se cumple en término”. Dijo que la nueva fecha de entrega quedó establecida para febrero próximo, aunque la promesa es que en enero ya no habrá más vallas que entorpezcan el tránsito peatonal.

Actualmente las tres cuadras más lejanas del Centro Cívico (de Palacios a John O´Connor) lucen casi terminadas, pero no están abiertas al tránsito. Todavía hay algunas tareas menores de terminación y falta pavimentar los cruces.

La primera cuadra, entre Urquiza y Quaglia, está muy avanzada y las más demoradas son las que van de Quaglia hasta Palacios, donde trabajan todavía las perforadoras neumáticas.

Ingrid tiene un comercio en Mitre al 500. Dijo que las ventas les bajaron un 50 por ciento desde que comenzó la obra y que algunos propietarios tuvieron contemplación con sus inquilinos y redujeron los alquileres “entre un 20 y un 40 por ciento”, pero el municipio mantuvo las tasas sin cambios. “La calle queda linda, pero mejor sería si cumplen las promesas”, afirmó.

Martín, vendedor de una chocolatería de Mitre y Palacios, hizo notar que el soterramiento del cableado “está incluido en el proyecto y todavía ni empezaron”. En su opinión, “existe voluntad y paciencia” de los comerciantes, “pero es muy complicado plantear una obra en un centro turístico con tanta improvisación”.

Todos los consultados mostraron interés en que la temporada alta de verano, a partir de las fiestas de diciembre, comience sin obstáculos para los transeúntes.

Ruival dijo que “todavía no está definido” en el municipio qué tipo de circulación permitirán en la calle Mitre. Pero aclaró que “no será exclusivamente peatonal”.