La semana en Bariloche: Dudas 20-01-04

Bariloche transita por una nueva temporada estival con muchísimos visitantes y también buen tiempo. El clima, permite emprender las numerosas excursiones de turismo aventura, concurrir a las playas y practicar la pesca, entre otras actividades recreativas. Es esta la época en la cual los empresarios aceleran la construcción de nuevos hoteles, restaurantes y obras destinadas a mejorar la oferta de servicios. Hoy Bariloche tiene una gran cantidad de obras en construcción.

El verano es asimismo el período que los centros de esquí de todo el mundo destinan para mejorar sus instalaciones. No hace falta ir muy lejos, basta con visitar el cerro Bayo, en Villa La Angostura, donde cada año Jean Pierre Raendonck instala algún nuevo medio de elevación o bien habilita nuevas pistas y confiterías.

No obstante, Catedral es un centro invernal atípico y debe ser por ello que en verano, normalmente, no se mejora nada. Las obras, salvo excepciones, empiezan generalmente en el mes de mayo y terminan en plena nevada.

Hace años que la montaña es administrada por las autoridades de la provincia de Río Negro y tiene dos pases de esquí, medios de elevación obsoletos, falta de baños públicos, confiterías y refugios destruidos y pistas de esquí en deplorable estado, que ocasionan un impacto muy negativo sobre el medio ambiente.

Es además un cerro lleno de conflictos entre el Estado provincial y las empresas concesionarias, los cuales han llenado páginas de diarios y expedientes en diferentes juzgados. Pese a ello, poco y nada se ha solucionado en la montaña, cuyos problemas crónicos son de vieja data, pese a que algunos parecieran haberlos descubierto hace apenas un año.

Llama la atención que cuando hay tanto para mejorar en el centro invernal, en pleno verano, con buen tiempo, no se esté haciendo nada. Sobre todo, cuando el gobernador de Río Negro, Miguel Saiz, afirma que la provincia «no tiene apuro con el cerro Catedral».

El gobernador tal vez tenga razón en afirmar que debe tomarse un tiempo para analizar la futura relación con la empresa Catedral Alta Patagonia, deudora del Estado y en convocatoria de acreedores, ya que por lo visto los gobiernos anteriores no supieron «ponerla en caja» ni planificar el futuro del centro invernal. No obstante, es increíble que en la montaña no se haga nada. Que no se refaccionen los destruidos refugios en la Ladera Sur, propiedad del Estado; ni se mejoren dichas pistas y tampoco los medios de elevación expropiados a Robles, que «sí o sí» deberán volver a ser usados durante el próximo invierno.

El gobernador podrá exigirle «hasta la última coma» a la empresa incumplidora. Por su parte, los barilochenses podrán comenzar a exigir de una vez por todas tener participación en los temas que les son propios, pues de lo contrario, el gobierno, el mismo que en estos años no supo cobrar los cánones, ni exigir las obras comprometidas por contrato, ni diagramar un centro de esquí moderno, puede volver a equivocarse y Catedral continuará siendo sólo una promesa.

Toncek Arko

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