La violencia familiar, prioridad en Valle Medio

CHOELE CHOEL (AVM).- Los casos de violencia familiar golpean en lo profundo a las comunidades del Valle Medio. El caso de Sofía, la nena de 3 años asesinada por su padre en Chimpay y el de los dos nenes muertos a manos de su progenitor en Río Colorado, no son más que la punta de un iceberg cuyas profundidades se hunden en la propia sociedad. La jueza penal Marisa Bosco, a cargo de ambos casos dijo ayer a este medio, luego de una improvisada conferencia de prensa, que se debe trabajar mucho para frenar estos fenómenos cada vez más graves.

En la zona se recuerda el desempeño de Nora Cader, una oficial de policía que trabajó muy intensamente sobre violencia familiar. Pero, como opinan distintas fuentes, se trata de esfuerzos aislados que no tienen su correlato en políticas de protección hacia las víctimas.

En este mal los principales afectados siguen siendo niños y mujeres, que en muchos de los casos son maltratados y abusados tanto física como psicológicamente durante mucho tiempo.

Meses atrás, y luego en reiteradas oportunidades, el fiscal en la zona, Miguel Ángel Flores, opinó que se trata de cuestiones culturales muy arraigadas y de difícil control. Las propias víctimas no pueden recurrir a su círculo íntimo dado que los allegados habitualmente actúan como cómplices o hacen la vista gorda ante estos sucesos.

En los dos casos que han conmocionado a la comarca, los autores de los crímenes actuaron además con saña con los niños como forma de venganza hacia sus mujeres.