Las cenizas del volcán Copahue son una pesadilla para la gente de Caviahue

CAVIAHUE (AN).- La municipalidad de esta localidad está buscando la manera de limpiar la ceniza que cubre la villa antes que la primavera derrita la nieve y las partículas de material volcánico se transformen en una pesadilla para propios y extraños.

Paralelamente, los técnicos de la Empresa Neuquina de Servicios de Ingeniería (Ensi) cumplieron con la segunda jornada de medición de los gases que emana el volcán Copahue los cuales, según informaron, no representan ningún riesgo para los pobladores.

El detector -cuya ubicación se rotó en forma permanente- no registró la presencia de sulfuro de hidrógeno ni de óxidos de azufre, los dos gases más temibles para la salud de la población.

Por otra parte, ayer el Ente Provincial de Agua y Saneamiento (EPAS) envió el informe bacteriológico que se le realizó al agua de la red «que dio perfecto, por lo que no hay ningún peligro», explicó el intendente de Caviahue Oscar Mansegosa. Para hoy o mañana se aguardan los resultados del análisis químico que cerraría la serie de estudios que reclama la población.

El problema de la acumulación de cenizas no es menor dado que en los días de viento la ceniza dificulta la visibilidad, congestiona las vías respiratorias e irrita la vista. Estas molestias, por ahora, no son tan serias porque la nieve y la ceniza forman una sola masa.

Con el volcán Copahue en actividad permanente desde hace más de un mes, es muy probable que en cualquier momento haya una nueva descarga de ceniza, por lo que se busca alguna alternativa para resolver este inconveniente y los que pudieran producirse.

La partículas de material volcánico cayeron en gran cantidad el 3 de julio y hay montañas de ceniza en el frente de cada una de las casas y en los costados de las calles.

Las autoridades provinciales, a través de distintos informes, aseguraron que de acuerdo a los análisis que se realizaron la ceniza no representa ningún riesgo para la salud de la población.

Un programa de limpieza

El intendente Mansegosa, afirmó que ya está en marcha el programa de limpieza para retirar las toneladas de material que tiñen de gris a Caviahue. El trabajo lo harán en conjunto la municipalidad y la dirección de Vialidad provincial. Mansegosa dijo que a fin de hacer más efectivo y completo el programa de limpieza se solicitará colaboración de los pobladores, quienes hasta ahora están más preocupados por la erupción del volcán que por quitar la ceniza.

«Por ahora y por consejo de la subsecretaría de Salud los días de viento usamos barbijo, en primavera y en verano tendremos que hacer lo mismo, aunque esperamos que con las precipitaciones que faltan se diluya una buena cantidad», añadió el jefe comunal.

Los camiones que transportan el material lo descargan en las costas del lago Caviahue, en un lugar donde no provoca perjuicios. El agua del lago no es bebible debido a su grado de acidez.

Mansegosa cree que a partir de las quejas de los pobladores -que motivaron la llegada a la villa de dos ministros del Ejecutivo neuquino- y las recientes respuestas de la provincia «tenemos que empezar a pensar en el futuro inmediato».

«Hemos obtenido todas las respuestas y soluciones, tenemos que pensar en la temporada de verano y en ver cómo utilizamos turísticamente este nuevo recurso que es el volcán en erupción», señaló.

El ministro de Desarrollo Social, Jorge Lara, informó que los equipos técnicos evalúan que la ceniza no afectará las pasturas de la región y por ende tampoco perjudicará a los animales. Lara dijo que la provincia realizará controles permanentes sobre los campos de veranada y descartó que la cantidad de material caído hasta ahora los haya contaminado.

El ministro, que el martes y el miércoles estuvo en Caviahue para dar garantías a los pobladores, explicó que a largo plazo el material caído servirá para mejorar la fertilidad de los suelos por el altísimo contenido mineral que tienen las partículas de origen volcánico.