Las Grutas: violento robo a una pareja
Las víctimas tienen 76 y 81 años. Los ataron y encapucharon para robarles 15.000 pesos.
Los delincuentes habrían contado con el dato preciso de que el matrimonio guardaba dinero en la casa.
LAS GRUTAS (ASA).- Un matrimonio de ancianos fue maniatado e intimidado cruelmente en su casa por dos jóvenes que aún no fueron detenidos por la Policía y que huyeron tras robarles unos 15.000 pesos. Los sujetos los coaccionaron para que develen el escondite del dinero, que estaban ahorrando para un trámite legal. La Policía presume que existió un entregador que aportó el dato acerca de la existencia del efectivo. El hecho ocurrió el domingo cerca de las 20, en un departamento de planta alta de la calle Río Negro al 500, en el que residen un hombre de 76 años, de apellido Galliano y su esposa de 81, la que por problemas de movilidad se encuentra en silla de ruedas. Los individuos, de alrededor de 20 años, golpearon a la puerta. Tenían los rostros parcialmente disimulados con la ropa que llevaban y al ser recibidos por el hombre ingresaron violentamente, tomándolo de los brazos y llevándolo hacia la habitación donde estaba su mujer. Luego, uno de ellos lo arrojó boca abajo sobre la cama, le cubrió la cabeza con mantas y le ató las muñecas a la espalda con un alambre, mientras el otro cubría con otra prenda el rostro de la mujer y la maniataba con firmeza a la silla con el lazo de una bata. Según relataron fuentes de la Unidad 29, las víctimas no sufrieron golpes, pero las acciones fueron acompañadas con gritos y amenazas para que confesaran dónde guardaban el dinero. Trascendió que la pareja estaba ahorrando para cubrir los gastos de una sucesión, por eso se especula que alguien que contaba con esta información la suministró a los malvivientes. Durante más de 10 minutos los jóvenes hurgaron en cada rincón de la casa hasta que el hombre les señaló un mueble donde estaba lo que buscaban. “Según relató el dueño de casa, se percató de la fuga de los sujetos cuando la vivienda quedó en silencio. Debido a que no pudo desatar sus manos comenzó a hacer ruidos con los muebles buscando captar la atención de los vecinos, que después nos dijeron que escucharon el bullicio e incluso algunos gritos, pero que no los tuvieron en cuenta”, manifestó el subcomisario Jorge Platino. Finalmente, cuando Galliano pudo zafarse de las ataduras se contactó vía celular con una familiar y ella dio aviso a la Policía. “Por el relato de algunos testigos los jóvenes habrían huido a pie, aunque no se descarta que luego utilizaran un vehículo que tal vez estuviera aguardándolos cerca. Hasta ahora no existen detenciones y nos encontramos en plena investigación”, manifestó Platino. El hecho generó profunda preocupación en la localidad, porque no es el primero que se registra en esa zona, casualmente cercana al destacamento policial. De hecho, días atrás fue asaltada una vivienda cercana, sin que haya aún datos de los autores.
Martín Brunella
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