Le construyen la casa a una madre viuda con ocho hijos

ROCA (AR).- Los chicos del refugio de Ninquihue decidieron ponerse manos a la obra para ayudar a una familia que no tenía un hogar para vivir. Todos los fines de semana se juntan en la construcción de Barrio Nuevo, que de a poquito va tomando forma, para poder sumar un aporte al objetivo final.

Los operadores de la fundación Ninquihue contactaron a tres de los ocho hijos de la familia trabajando en la calle y a partir de ellos pudieron conocer la difícil situación por la que estaban pasando.

El padre de los niños murió el año pasado y la madre quedó sola, embarazada, con siete hijos, sin trabajo y viviendo hacinados en una habitación de cuatro por tres con ladrillos pegados con adobe y sin calefacción.

A partir de que conocieron la dura realidad de esta familia organizaron una campaña solidaria para conseguir los materiales y herramientas. Inmediatamente uno de los vecinos del barrio con amplia experiencia en la construcción se ofreció para dirigir la obra. La cantidad de «obreros» varía según el fin de semana pero son aproximadamente diez, de los chicos que asisten al refugio de Ninquihue, todos los días.

«La idea es que ellos que han sido ayudados por la fundación sepan que también pueden hacer mucho con su aporte solidario para toda la comunidad y en particular en este caso para esta familia que tanto lo necesita», explicó David Zúñiga, uno de los operadores de calle que hizo el primer contacto con los niños.

La semana pasada se habían quedado sin ladrillos pero gracias al aporte de varios corralones y vecinos consiguieron todos los necesarios para construir el hogar de siete metros por cuatro, espacio en el cual podrán vivir un poco más cómodos.

Igualmente, en este momento, están necesitando otros materiales como chapas, tirantes, algún aislante (lana de vidrio), cemento y cal. También sería de suma utilidad algún artefacto para la calefacción y cocina. Las personas que puedan ayudar en este sentido pueden comunicarse al teléfono 424192 o dirigirse a Libertad 2100 donde está ubicado el refugio de la fundación.

Ninquihue es una organización que se ocupa de brindarles una ayuda a chicos que trabajan y viven en la calle. Algunas de las actividades que realizan son talleres de calado en madera, títeres, artesanías varias, la revista «Cara y ceca», entre otras actividades.

Recientemente un vecino de Roca les donó una hectárea de chacra en la zona de ruta 22 y Mendoza para realizar una huerta. Mariano Herrera, coordinador del refugio, informó que están organizándose y buscando los recursos para hacer un invernadero en donde producirían hortalizas para el almuerzo que se les brinda a los chicos de Ninquihue y para distribuir entre las familias. «La idea es hacer un trabajo comunitario e intentar un proyecto de producción intensiva para lograr un ingreso para quienes produzcan», explicó Herrera.