Licencias comerciales provisorias bajo la lupa

NEUQUEN (AN).- En el Concejo Deliberante se analiza la posibilidad de dar de baja a las licencias provisorias de los locales a los que concurre masivamente la población y no guardan los requisitos necesarios de seguridad, sean de entretenimiento, de juego, de actividades culturales, religiosas o deportivas. Entienden que muchos funcionan hace años con permisos temporarios sin adecuarse íntegramente a la normativa.

La iniciativa del interbloque propone pasar blanco sobre negro todas las licencias provisorias en un plazo de 45 días; revisar los permisos definitivos otorgados a locales que no reúnen condiciones de seguridad; y exigir las adecuaciones correspondientes a los establecimientos que desarrollan actividades de tipo social, cultural o religiosa.

El director general de Comercio, Fabricio Torrealday, dijo que está en conocimiento de la propuesta pero evitó dar una opinión inmediata, «hasta analizarla a fondo».

El funcionario la relacionó con la realizada recientemente por los empresarios de Ticket, que lo acusaron de «amiguismo» y pidieron que se den de baja las licencias de todos los boliches y se emitan nuevas a los que «realmente» cumplen los requisitos de seguridad.

Torrealday advirtió en esta solicitud el blanqueo solapado de infracciones, que afirmó «no estoy dispuesto a dar».

A priori cree dificultoso bajar las licencias provisorias pues «hay casos de que no logran la definitiva porque les falta realizar alguna adecuación y sin embargo son locales seguros».

Un decreto emitido en 1997 establece los requisitos para obtener una licencia comercial, recordó el interbloque ARI, Frente Grande y Partido Justicialista, poniendo bajo la lupa una reglamentación que consideran no acorde a los tiempos que corren.

«Necesariamente debe darse una revisión de todas las condiciones de habilitación de locales de concurrencia masiva, en cumplimiento del debido resguardo de la seguridad de las personas, disponiéndose com primera medida la caducidad de las licencias provisorias», explicó el frentista Carlos Di Camillo.

El proyecto de ordenanza propone que todas las licencias comerciales otorgadas con el carácter de provisorias para el funcionamiento de instalaciones de gran concentración de personas caduque en 45 días, a menos que en este lapso cumplan con todas las normativas.

También propone revisar la licencia definitiva de aquellos que no cumplen las normas y avanzar en los establecimientos que, aunque no cuenten con licencia comercial, desarrollen actividades con mucha afluencia de público, como pueden ser iglesias y clubes. En todos los casos empareja el período de adecuación en mes y medio, caso contrario promueve la clausura.

Di Camillo recalcó la necesidad de contar con un cuerpo normativo «claro y preciso que resulte una herramienta ágil y eficaz para el otorgamiento de licencias» a fin de evitar tragedias como la ocurrida a fines de 2004 en Cromañón, un boliche de la Ciudad de Buenos Aires. Murieron casi 200 jóvenes por asfixia y quemaduras graves en el cuerpo. El interbloque insiste con que la licencia definitiva debe ser revisada en forma periódica, a fin de garantizar que no se hayan realizado modificaciones en las instalaciones que pongan en riesgo la vida de la gente.