Llegaron recibos de gente que no trabaja allí

ROCA (AR).- El gobierno de Río Negro le debe una muy buena explicación a aquellos que todos los días ponen su esfuerzo, sin cobrar un solo peso, para atender la biblioteca popular de Stefenelli.

La respuesta tendrá que surgir de la Agencia Río Negro Cultura, que días atrás envió al centro público roquense dos recibos de sueldo correspondientes a personas que no trabajan en el lugar.

Lo que más indignó a la comunidad del barrio es que sus bibliotecarias reclaman desde hace años

que la provincia empiece a pagarles una remuneración y sistemáticamente se lo niegan. Con el reciente episodio, la sospecha es que alguien está cobrando por el trabajo que realizan otros.

Todo comenzó el sábado pasado, cuando un sobre con membrete de Cultura llegó a la «Casa de Amigos», tal cual el nombre de la biblioteca que funciona en el predio del ex Ferrocarril.

Este diario pudo observar los documentos, que no dejan dudas sobre quién era el destinatario, porque en varias páginas se reitera el nombre de la biblioteca en el encabezado. Sin embargo, las beneficiarias de los haberes no eran Gloria Argamonte ni su compañera Beatriz, sino un hombre y una mujer totalmente desconocidos en Stefenelli.

Los recibos detallaban pagos netos por 619,09 y 1.342,50 pesos respectivamente, además de los montos correspondientes a la sexta cuota del primer semestre del sueldo anual complementario.

Las notificaciones remitidas en el sobre llevan la firma de Tito Argentino Carranza y Jorge Betancourt, responsables de Liquidación de Haberes y Recursos Humanos respectivamente en la Agencia Río Negro Cultura.

«Es muy extraño. Yo trabajo hace casi 12 años en la biblioteca y jamás cobré un sueldo, a pesar de que lo reclamo desde 1996», señaló Argamonte.