Lo amenazaron de muerte
La violencia en el fútbol argentino se reinventa minuto a minuto. Ayer, sobre el filo de la noche, el vicepresidente de Estudiantes, Julio Alegre, admitió que fue amenazado «de muerte» por barras 'pinchas'.
Alegre confesó las amenazas, que se produjeron en setiembre de este año, días antes de la asamblea que aprobó la remodelación del estadio de 57 y 1. El dirigente hizo la denuncia en la comisaría 1ra. de La Plata, en donde habló de «varios llamados amenazantes e intimidatorios» en su teléfono móvil.
Explicó que lo asustaron con un temerario «te vamos a matar» y reconoció que la voz «le resultaba conocida», aunque no pudo precisar a quien le pertenecía. Recordó que uno de esos llamados lo recibió el pasado 18 de setiembre, cuando se le dijo textualmente: «ah, entendiste por fin, el sábado es la asamblea y el lunes tenés que renunciar porque la barra no te quiere». A lo que el dirigente, en tono burlón, respondió: «no sé si alcanzo a renunciar esta noche, pero quedate tranquilo que mañana voy y lo hago, así te quedás tranquilo vos y los que te mandan».
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