Los camaristas que excarcelaron a Chabán deben seguir con la causa

La Cámara del Crimen confirmó ayer en la causa en la que se investiga la tragedia de Cromañón a los jueces María Laura Garrigós de Rébori y Gustavo Bruzzone, quienes el viernes pasado concedieron la excarcelación del empresario Omar Chabán.

La Cámara, con el voto unánime de Abel Bonorino Peró y José Manuel Piombo, rechazó las excusaciones que habían presentado los jueces que excarcelaron a Chabán, quienes el lunes último, después de la trascendencia pública de aquel fallo, habían pedido apartarse del expediente.

La resolución entendió que las condiciones invocadas por los jueces para excusarse se repetirían cualquiera fuera el camarista que debiera intervenir en el futuro.

Además, consideró que no existen causales de apartamiento pues la repercusión y disturbios en que derivó la decisión fueron posteriores a los hechos en los que ambos camaristas debieron intervenir, con lo cual no se vieron afectadas sus imparcialidades ni criterios jurídicos.

Mientras tanto, el gobierno defendió nuevamente su derecho a tomar posición en el fallo que permitió la excarcelación de Chabán y negó interferencias en el Poder Judicial, en tanto que la ministra de la Corte Suprema Elena Highton sumó su posición y pidió «minimizar» las «opiniones políticas».

El presidente Kirchner sostuvo que el Ejecutivo es el que «más defiende» la independencia de la justicia, aunque reclamó que recupere el «sentido común» y volvió a cuestionar las defensas «corporativas, que se olvidan de los intereses de la gente».

La Cámara del Crimen, en un plenario celebrado a principios de esta semana, había criticado con dureza las expresiones de Kirchner y de otros funcionarios del Poder Ejecutivo cuestionando la excarcelación de Chabán.

Esa reacción, que fue elípticamente definida como «corporativa» por el presidente, de alguna manera anticipaba la decisión que adoptaron ayer los camaristas Piombo y Bonorino Peró, pues respaldaba enfáticamente la «independencia del Poder Judicial».

En los hechos, la decisión de ayer implica que Bruzzone y Garrigós de Rébori serán los jueces de alzada -junto con Rodolfo Pociello Argerich, de licencia hasta mañana y en viaje por Estados Unidos- revisarán lo que en primera instancia resuelvan el juez Marcelo Lucini y su colega María Angélica Crotto cuando se reincorpore tras su enfermedad.

La primera decisión trascendente que deberán adoptar los jueces que excarcelaron a Chabán será el pedido de excarcelación de la presunta mano derecha del empresario, Raúl Villarreal.

El abogado Albino Stefanuolo, defensor de Villarreal, ya pidió la excarcelación, que le fue denegada por Lucini en primera instancia.

Pero esa decisión fue apelada y, en definitiva, deberá resolver la formación de la Sala Quinta que excarceló a Chabán, que previsiblemente adoptará idéntico criterio.

Sobre la marcha de la causa Cromañón propiamente dicha, los abogados de las querellas presentaron ayer una catarata de escritos al juez Lucini pidiendo la indagatoria del jefe de gobierno porteño, Aníbal Ibarra, por su presunta responsabilidad en el delito de «homicidio simple y lesiones».

El juez, quien la semana próxima comenzará con la ronda de indagatorias de los músicos de la banda Callejeros, aún no resolvió si llamará o no a Ibarra a declarar como acusado.

(DyN, Télam y R.Central)

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