Los cuatro detenidos fueron trasladados al Penal 1

Corrupción de menores

Sólo dos de los cuatro detenidos por hechos de presunta corrupción de menores declararon en calidad de indagados. Los restantes se mantuvieron en silencio.

En el mediodía de ayer todos fueron trasladados desde la comisaria Primera donde pasaron la noche a Tribunales .

Jorge Morón, un mecánico del radio céntrico viedmense, fue el primero en subir del sector de celdas al juzgado de Favio Igoldi, ante quien se abstuvo de declarar.

Luego siguió el productor Nazario Contín, quien declaró brevemente en su calidad de indagado, mientras que en tercer lugar fue conducido hasta ese primer nivel del edificio el comerciante Omar Ledesma.

El último fue Alfredo Bonifacio Cabeza que al igual que Contín prestó declaración aunque, según trascendidos, se habrían limitado a desvincularse de los hechos que se le imputan pero no habrían respondido preguntas.

Los cuatro hombres fueron trasladados luego al Penal N°1, donde permanecen alojados.

Si bien no ha trascendido información sobre esta causa se supo que se les imputa a los cuatro haber mantenido relaciones sexuales con adolescentes en situación de vulnerabilidad social y la mayoría institucionalizadas.

Todos habrían sido reconocidos en ruedas de personas por algunas de las niñas víctimas y ese habría sido uno de los motivos -sumados a otras pruebas- que habrían generado las órdenes de detención. En tanto no se descartan otras privaciones de la libertad.

Sobre estos cuatro adultos el fiscal de la causa pidió esta semana al juez Igoldi que fueron citados a declarar en calidad de indagados. También sumó a esa solicitud a una mujer, cuya identidad no trascendió ni tampoco pudo ser confirmado si fue citada.

Ayer fue particularmente una mañana de intenso movimiento en Tribunales. Por un lado la sesión del Consejo de la Magistratura que formuló causa contra el camarista penal suspendido Juan Bernardi, mientras 17 postulantes esperaban dar la entrevista personal ante los consejeros con la expectativa de ser elegidos para cubrir distintas vacantes. Por otro lado testigos de audiencias en diferentes juzgados que observaban sin entender que los judiciales se asomaban a los pasillos de los distintos niveles para aplaudir a modo de despedida a una abogada de la Cámara Laboral que accederá a los beneficios jubilatorios. En medio de todo esa mezcla, la angustia de familiares de los cuatro detenidos en el marco de otra causa por presunta corrupción de menores.

A pesar de todo ese entorno no pasaron desapercibidos para la prensa que montaba guardia en el juzgado penal a cargo de Igoldi, la consternación de dos hombres al observar la salida de su papá tras declarar ante el juez.

La Policía que lo custodiaba permitió un lugar más resguardado para que esos hijos adultos saludaran a su padre, sin poder contener las lágrimas.

DeViedma