Los golpes no doblegan al Club San Martín

Al momento de esta nota Pablo Mellado no pasaba por un buen momento. No tenía ningún problema personal, aunque de alguna forma lo era. Es duro cuando, de buenas a primeras y por factores externos, el esfuerzo se va por las alcantarillas. “Nos robaron casi todo, la verdad que no lo puedo creer…”, repetía como una letanía.

Ahora, gente como Mellado no es fácil de doblegar. Ser dirigente de un club no es tarea sencilla en ningún lugar de la región, pero en el barrio Don Bosco las carencias se ven con mayor fuerza. Entonces, si dos o tres individuos ingresan al club, amparados por la impunidad de la noche, y se llevan ropa, elementos deportivos, botines, herramientas y todo lo que encuentran a su paso, ese es un factor que desalienta. Pero no doblega.

Pablo Mellado se crió en los pasillos de San Martín. Vio todo, o casi todo. Jugó en las inferiores y fue protagonista de los últimos dos títulos logrados por los Leones en la liga Confluencia: los del ‘88 y ‘97. “Me retiré cuando ganamos el último título para el club, por eso nuestro sueño es repetirlo, ahora desde otro lugar.Tenemos un buen equipo y un gran cuerpo técnico”.

P- ¿Ese es el gran objetivo?

R- Sería hermoso volver a obtener un título de primera en la liga Confluencia y jugar algún escalón más arriba, pero eso sin olvidarnos de la función social que tenemos. En la actualidad estamos cerrando un proyecto para refaccionar los vestuarios y realizar un albergue para una delegación completa, con cocina baños, bien equipado. Esperamos que antes de fin de año comiencen las obras.

P- No es tarea para nada sencilla generar crecimiento en un club.

R- Es verdad. Nosotros no tenemos apoyo económico casi de nadie, sólo nos ahorramos los impuestos municipales y tenemos un convenio con provincia. Hay una muy buena administración, por eso estamos proyectando el albergue. Este es un club para los que tienen plata y para los que no. El que no puede pagar sabe que puede venir. Pero, por sobre todas las cosas, contamos con un grupo de padres muy trabajador, 20 personas que colaboran incansablemente.

Para el actual presidente, San Martín fue mucho más que un lugar para ir a divertirse pateando una pelota. “El club tiene una historia muy importante en contención social, porque se ubica en el corazón de la ciudad y es clave para todos los vecinos. Lo fue para mí, por eso estoy acá, para retribuir algo de lo mucho que el club me dio.”.

Hoy San Martín cuenta nada menos que con alrededor de 400 chicos en fútbol, entre federados y escuela de fútbol, con una lista de espera “que se acrecienta día a día”. Además, practican hockey femenino unas 120 chicas y patín artístico otras 60.

P- ¿Y se retribuye de qué forma?

R- Conteniendo a los chicos, esa es nuestra función y de la que nunca nos corremos. Claro que queremos salir campeones y tratamos que nuestros jugadores tengan los mejores profesores, elementos, infraestructura, pero no olvidamos que tenemos una función social. Lo importante que es el club para muchos queda reflejado, por ejemplo, en que acá todos los días toman la merienda 150 chicos.

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