Los incendios en Río Colorado sufrieron un brusco incremento

El repentino incremento en la cantidad de incendios producidos en la comarca obligó a los bomberos a aceptar la colaboración de efectivos que ya estaban retirados. En poco más de dos semanas de agosto, los cuarteles de Río Colorado y de Colonia Juliá y Echarren atendieron 38 incendios forestales en chacras y de maleza en terrenos baldíos de la localidad.

Los números oficiales dan cuenta de que los 40 hombres que integran los dos equipos tuvieron más de dos salidas diarias, siempre con intenso trabajo para evitar que los incendios provocaran daños irreparables.

Varios de los incendios -intencionales en su mayoría- llegaron a poner en riego o al menos afectaron en forma directa con el humo unas 20 viviendas, 3 comercios, un hotel y una escuela primaria con su jardín infantes. Además las llamas provocaron daños en cultivos hortícolas y en cuadros con plantas frutales, postes de energía, de telefonía, cercos perimetrales y alambrados entre otros.

Actualmente, el estado de abandono en que se hallan cientos de terrenos baldíos agrega un factor de riesgo que preocupa. Los predios se ven llenos de malezas y basura, lo que permite la proliferación de ratas y alimañas.

En su gran mayoría, los incendios se iniciaron en forma intencional, es decir originados por niños o adolescentes para divertirse, se informó oficialmente. Un porcentaje menor se debió a descuidos a la hora de quemar para limpiar chacras o terrenos en días en que había mucho viento.

Las últimas semanas se hizo habitual escuchar las sirenas y ver pasar raudamente a camiones y camionetas que integran las distintas unidades de los cuarteles. Los registros dan cuenta que en sólo 15 días, los 40 hombres que integran los cuarteles de bomberos más la colaboración de personal retirado trabajaron en conjunto 43 horas y 35 minutos, para controlar y sofocar incendios que devoraron unas 102 hectáreas de chacras y terrenos.

Además tuvieron que intervenir para extinguir fuegos en tres viviendas, acudieron a tres accidentes de tránsito, un escape de gas y rescates de personas. Adicionalmente, personal de la localidad con la perra “Ayca” trabajó durante 13 días en Bariloche buscando al efectivo de la policía muerto Lucas Muñoz.

Los registros