Los radicales terminaron a las piñas
Militantes radicales alineados con el intendente de San Isidro, Gustavo Posse, con el dirigente bonaerense Leopoldo Moreau y miembros de la Juventud Radical se agarraron ayer a trompadas en la entrada del comité porteño del partido, donde sesionaba la convención nacional. Los barras identificados con banderas y remeras del intendente Posse llegaron temprano para ubicarse en el palco del auditorio, donde obligaron a retirarse a los referentes de la Juventud Radical y de la Franja Morada que también querían permanecer allí con sus pancartas. Allí se produjo una primera escena de tensión que se reiteró más tarde, en simultáneo al discurso de la electa Lilia Puig de Stubrin al frente del organismo partidario, primero en el hall de la sede del Comité Capital y luego sobre la calle Tucumán al 1600, donde se produjeron insultos y trompadas. La disputa obligó a que varios negocios de la cuadra cerraran sus puertas y luego la calle permaneció cortada mientras se desarrollaban los discursos de los dirigentes en el auditorio del primer piso. Los manifestantes ligados a Posse continuaron en el medio de la calle Tucumán con redoblantes y bombos, y canciones de apoyo al intendente que busca ganar espacio en el partido, sobre todo luego de las reuniones que mantuvo con dirigentes de la centroderecha bonaerense. Puig de Stubrin, exdiputada nacional por Santa Fe, es la primera mujer en la historia partidaria en ocupar ese cargo y llegó por el consenso alcanzado entre Mario Barletta, con Ricardo Alfonsín, Ernesto Sanz y Julio Cobos, entre otros dirigentes. (DyN)
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