Los tres ganaron en Conde de Godó. Gaudio y Carlos Berlocq, las pálidas.

Por momento volvió a mostrar lo mejor de sí, y eso ilusiona. Hasta él mismo lo reconoció cuando habló ante la prensa. «Jugué muy bien, presioné desde el principio y eso ayudó mucho. Ganar fácil te da confianza, si sigo así puedo estar en mi mejor nivel».

Las palabras de David Nalbandian, cargadas de elocuencia, dejaron más que en claro que el cordobés desea con ansias el trofeo Conde de Godó.

Ayer se sacó de encima al local Alberto Martín (6-2 y 6-0) y se metió en octavos de final del torneo barcelonés. Posiblemente mañana se tope con Carlos Moyà, que hoy jugará contra su compatriota Félix Mantilla.

El que emuló a Nalbandian fue Agustín Calleri, quien alcanzó la misma instancia al dejar en el camino al italiano Paolo Lorenzi por un doble 6-2. Ahora tendrá un partido más complicado ante Tommy Robredo, tercer clasificado.

Otro que avanzó en el polvo de Barcelona fue Guillermo Cañas, que se metió en la segunda ronda luego de dar cuenta de Max Mirnyi, por 6-2 y 7-6 (7-4).

No fue todo positivo para la Legión nacional, ya que Gastón Gaudio sigue de capa bien caída y ayer fue vapuleado por el sueco Robin Soderling. Luego del lapidario 6-1 y 6-0, el 'Gato' hizo una dura autocrítica. (ver aparte)

Carlos Berlocq pagó el precio por una contractura en la pierna izquierda, que motivó su abandono ante el serbio Boris Pashanski, cuando caía por 4-0.

Pero el sorpresa de la jornada la brindó Simone Bolelli, 103 del planeta y llegado desde la qualy, quien dejó en verguenza a Marat Safin, ex número uno y undécimo clasificado en el suelo barcelonés. El italiano tuvo su mayor alegría tenística luego de un 6-4 y 7-6 (7-5), y ahora se medirá su compatriota Potito Starace.

Muchos en Barcelona imaginan una final entre Nadal y Nalbandian. El cordobés contesta a ello: «No jugué nunca en contra de él, tengo ganas porque somos bastante amigos y sería lindo», soñó.