Maira Arias, la neuquina de Oro

JUEGOS PANAMERICANOS

Los zonales vivieron una jornada dorada (y bronceada) en los XVII Juegos Panamericanos que se desarrollan en Toronto. Maira Arias se despachó con una actuación impresionante y ganó los 10.000 metros a los puntos de patín carrera y de esta forma le puso el broche perfecto a un día que empezó con la conquista de Joaquín Iwan, que fue tercero en la prueba de cuatro remos sin timonel.

La neuquina Arias, que dominó la carrera de punta a punta, finalizó con 41 puntos y un tiempo de 17m31s. Dejó en el camino a la ecuatoriana Emma Clare, con 11 puntos, en tanto que la campeona mundial, la colombiana Johana Viveros, se cayó y no pudo completar la prueba.

Así, Argentina conquistó su segunda medalla de oro en Toronto tras la que obtuvo el domingo pasado Giselle Soler en patinaje artístico.

“Todas las noches soñaba con el oro”, aseguró Arias, de 28 años, quien vive en Mar del Plata, pero defiende los colores del club Alta Barda y disputa en Canadá sus primeros Juegos Panamericanos.

La patinadora fue subcampeona mundial en Rosario 2014, donde perdió justamente con la colombiana Viveros.

“Es un triunfo que me llevo y está buenísimo, pero no una revancha. Nuestro deporte no es olímpico, entonces unos Panamericanos son muy importantes. Estos son mis primeros Juegos y desde que empecé a entrenar en diciembre, después del Mundial, puse todo pensando en Toronto”, afirmó.

“La carrera empezó lenta y yo soy de carreras más rápidas, entonces cuando se empezó a mover el pelotón ya hice el primer embalaje y me sentí bien para seguir sumando. Me empece a alejar y saqué gran diferencia”, describió Arias sobre su carrera, que se desarrolló cerca del predio Acuático, ubicado a unos 30 kilómetros del centro de Toronto.

Sobre la caída de la colombiana Viveros, Arias explicó que “escuché que cayó pero no vi quién era, después como no estaba en la pantalla supuse que había sido ella. Una lástima porque iba a ser una carrera más mano a mano, es una corredora muy fuerte. Son cosas que pueden pasar.

En el turno mañana, la “alegría zonal” fue de Iwan, el remero de Bariloche, que lideró al cuarteto a la conquista de la presea de bronce.

“Nos la jugamos a ganar, no queríamos la de plata ni la de bronce, queríamos la de oro pero como se dieron las cosas subimos con orgullo a recibir la medalla”, dijo Joaquín, el más experto del equipo.

Mejor aún les fue a Cristian Rosso y Rodrigo Murillo, que quedaron segundos de Cuba en dos pares de remos cortos.

“Hicimos todo lo que podíamos, queríamos el oro pero Cuba fue el mejor”, sostuvo Rosso, de exitosa campaña junto a Ariel Suárez durante varios años. “Nos preparamos bien y ahora hay que hacer lo mismo para el Mundial”, agregó.