Marcha en el oeste neuquino pidió justicia por el crimen del locutorio

NEUQUEN (AN).- Cerca de medio centenar de vecinos y comerciantes del barrio Gran Neuquén marcharon ayer reclamando justicia por el asesinato del Roberto Santillán (43), ocurrido el domingo pasado cuando atendía un locutorio ubicado en la calle Godoy y Quimey de esta ciudad.

Mientras tanto, los investigadores siguen sin pistas clarar de los autores del crimen, aunque sospechan de una banda delictiva con base de operaciones en el barrio San Lorenzo.

La movilización, que estuvo encabezada por Estela San Andrés, la esposa de Santillán, se realizó en horas de la mañana y culminó con un corte de tránsito sobre la calle Rodhe.

En este lugar los vecinos y comerciantes reclamaron el esclarecimiento del asesinato y pidieron mayor seguridad en el barrio.

Además se les solicitó a los investigadores del crimen que le brinden una custodia permanente a los familiares de Santillán, ya que como se informó, dos de sus hijos estaban presentes cuando un delincuente le disparó un balazo en el pecho.

«Los vecinos quieren justicia porque él era un hombre muy querido», dijo Estela San Andrés durante la marcha. Asimismo destacó que su principal preocupación en estos días «es poder conseguir un trabajo para poder sostener mi hogar y mi familia».

La viuda recordó además que su marido fue compañero de trabajo durante nueve años de Horacio Quiroga (no precisó dónde) y le pidió al intendente que no lo olvide.

Respecto del caso, dijo que «dejo todo en manos de Dios». También señaló que «no me sirve una plaza con el nombre de mi marido». Muy cerca de allí está la plaza Ulloa, que recuerda al gendarme de ese nombre asesinado también durante el asalto a un quiosco.

El próximo viernes, los vecinos realizará una asamblea a las 19 horas en el playón del hospital Heller.

En esa oportunidad definirán los pasos que seguirán para darle continuidad a las demandas realizadas.

Según adelantaron, se baraja como alternativa hacer una marcha todos los miércoles por la mañana, para pedir mayor seguridad en el barrio y el esclarecimiento del crimen.

«Queremos que baje algún funcionario a darnos una respuesta», coincidieron los manifestantes.

La investigación, en tanto, no logró determinar aún quien mató a Santillán.