Un Iron Man de barrio

Empezó por casa y no paró más. El atleta roquense completó cuatro ediciones del Iron Man y participó de dos finales de XTerra en Hawai. Según él, cualquiera puede lograrlo. Sí, claro...

Yo soy: Maxi Morales

P- En diez palabras, o menos, ¿quién es Maxi Morales?

R- ¡Un atleta de barrio que quiso ser diferente a sus amigos!

p- ¿Cuándo decidiste ser un atleta de múltiples disciplinas?

r- No lo decidí, nació solo: cuando supe que era el tetratlón desafío al Valle de la Manzana en 1996, del cual me convertiría en el máximo ganador. Ni siquiera soñaba con eso.

p- ¿Qué es un Iron Man?

r- Técnicamente, es una competencia atlética que combina 3,8 kilómetros de natación, 180 kilómetros de ciclismo y 42 kilómetros de pedestrismo. El Iron Man nació en Kona, Hawai, en 1978, a partir de una apuesta de un grupo de marines norteamericanos que apostaron un cajón de cerveza para ver ¡quién podría hacer todo eso!

P- Y le pusieron Iron Man…

R- Sí, porque era tan dura la prueba que quien pudiera terminarla era un “hombre de hierro”. Hoy, son más de 50 pruebas Iron Man en el mundo que dan clasificaciones a lo que se llama la final, que se disputa cada año en Hawai.

p- Llevado al terreno del deporte, ¿qué “superpoderes” atléticos te da un Iron Man?

r- No te da poderes, pero te hace conocerte y entender cuáles son tus límites deportivos. El Iron Man es la madre de todas las pruebas atléticas combinadas. Lo puede hacer cualquiera, porque lo que no se ve desde afuera es que se trata de la cabeza tanto como de lo físico. No todo es físico, lo mental es clave.

p- ¿Cómo llegaste vos a ser un Iron Man?

r- Probé mis límites. A medida que disputás pruebas vas queriendo superar el objetivo. Primero fue en Pucon, en el año 2005, en un Medio Iron Man. Dije ok, voy por más. Pero, inmediatamente te preguntás: “¿Seré capaz?”. Ahí está el cambio, y ocurre en tu cabeza.

p- ¿Cualquiera puede serlo?

R- Cualquier persona lo puede hacer: hoy en día con entrenadores, y con cuatro décadas de historia del Iron Man como prueba atlética, se ha demostrado que no hay límites de edad, sexo ni capacidades diferentes que lo impidan. Te doy un ejemplo: yo tenía un alumno, un muchacho de unos 38-40 años, que un día me dice “Maxi, quiero correr un Iron Man”. ¡Pero no sabía nadar! Aprendió a nadar de grande para hacer el triatlón, después aprendió a competir en natación y lo hizo: el tipo corrió cuatro Iron Man.


Formá parte de nuestra comunidad de lectores

Más de un siglo comprometidos con nuestra comunidad. Elegí la mejor información, análisis y entretenimiento, desde la Patagonia para todo el país.

Quiero mi suscripción

Comentarios