Los millennials no quieren bebés, sí gatos y perros

Es la generación que más mascotas tiene con respecto a otros tiempos. Muchos de ellos prefieren tener un perrhijo. Todo un fenómeno social.

Los millennials no quieren bebés, sí gatos y perros

Es la generación que más mascotas tiene con respecto a otros tiempos. Muchos de ellos prefieren tener un perrhijo. Todo un fenómeno social.

Los millennials no quieren bebés, sí gatos y perros

Es la generación que más mascotas tiene con respecto a otros tiempos. Muchos de ellos prefieren tener un perrhijo. Todo un fenómeno social.

Gentileza

Los jóvenes prefieren más hoy, en su mayoría, tener cachorros en vez de hijos.

Los millennials -la generación que nació entre 1980 y 2000- desafían todos los paradigmas de la sociedad, y uno de ellos radica en su vida privada. Sus hábitos de vida y consumo son tan diferentes que cortaron con esquemas religiosos, políticos, económicos, culturales y familiares.

Y precisamente, es en este último, (la familia) donde su esquema de hogar no necesariamente es papá, mamá e hijos. Ellos han establecido que una mascota (perrito o gatito) es una buena alternativa como núcleo familiar.

Un estudio realizados a varias personas de esta generación indica que la mitad de las personas de 30 años tiene gatos, mientras que las tres cuartas partes tienen perros.

Por otro lado, publicó Forbes, los millennials adoptan un 35% más mascotas que sus antecesores, los baby boomers.

Si bien, ambas generaciones quieren mucho a sus animales, solo los jóvenes de ahora invierten mucho más en los gastos de sus mascotas.

Hoy es muy común ver cómo varias personas pagan por ropa, veterinarios, colegios y hasta “cuidadores” con tal de ver a sus mascotas felices; aunque en realidad es más una emoción compartida. Incluso, muchos dueños aseguran que estas responsabilidades se asemejan a las de tener un hijo.

Ellos además, saben que tener una o varias mascotas es una decisión de vida y que exige de un compromiso y que por el hecho de que sean animales los van a dejar a la deriva, por el contrario, les dan un lugar dentro de su familia invaluable.

Para un millennials de EE.UU, por ejemplo, ya no es problema llevar a su “hijo” perro o gato al trabajo pues la tendencia ‘pet friendly’ sigue creciendo y ya muchas de las compañías y multinacionales permiten llevar a la mascota al trabajo.

Se dice que un ocho por ciento de los lugares de trabajo de Estados Unidos permiten a los empleados llevar a sus mascotas a la oficina, que es hasta un 5 por ciento desde de 2013. Algunas de ellas son: Amazon, Ben & Jerry, Google, Clif Bar, Build-A-Bear, Petco y Etsy, entre otros.

De los millennials, 57% son amos de un gato o un perro y el 63% está de acuerdo que las mascotas deben ser atendidas. Fundamentalmente, es más probable que a comparación de otras generaciones tengan una mascota, pues no están casados o tienen hijos. Esto está en un momento de aumento. De acuerdo a recientes censos, hay más gente sola que nunca antes.

¿Dónde encajan las mascotas en esta sociedad de solos? El 50% de las personas que viven solas no están realmente solas. Tienen mascotas. El ser dueño de una ha sido una situación que ha incrementado un 16% de 2006 a la fecha. En comparación, hay un incremento sólo del 1.4% con las familias que se hacen de un animalito.

Un nuevo fenómeno ha llegado, de acuerdo a otro estudio hecho por Roper Peports, 6 de cada 10 dueños de mascotas, consideran a éstas como miembros de la familia: el soltero que vive solo, como padre, pero de un perrhijo. Y es algo que está creciendo en muchos lados.


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