Mitad en alerta, mitad confiado

Tenis

“Me tratan como un campeón en todos lados”. El dueño de la frase es Juan Martín Del Potro. Sentado en el jardín de la zona de jugadores del complejo de Flushing Meadows, el mejor jugador de Argentina explica las sensaciones que le genera regresar al sitio donde se metió en la historia del tenis, ya sin tener que pensar en cirugías o muñecas lesionadas.

Pero a la vez, reconoce que está sintiendo el desgaste que le generó su inolvidable 2016, con el título de la Copa Davis, la medalla de plata en los Juegos Olímpicos de Río y memorables victorias sobre Novak Djokovic, Rafael Nadal, Andy Murray y Stanislas Wawrinka, entre otros.

Incluso, antes de debutar hoy ante el suizo Henri Laaksonen en el US Open, el exnúmero cuatro del mundo admite que le está costando encontrar motivación. Asegura que si su tenis y su hambre se despiertan puede ilusionarse con hacer un buen torneo.

P- ¿Cómo llega a un torneo tan especial en su campaña?

R- Estoy en ese camino de encontrar la motivación, que en los últimos torneos me costó mucho. Es una realidad que no hay que ocultar, ni mentir. Me está costando mucho jugar. El sacrificio que hice para volver a jugar al tenis, todo el año anterior, las cosas buenas que me pasaron, tal vez estoy pagando esas consecuencias.

P- ¿Regresar a Nueva York puede servirle?

R- Venir acá siempre es especial. Me hacen sentir un campeón en cada lugar donde voy. Cada momento que camino por acá me recuerda a algo del 2009 y eso automáticamente me renueva las ganas y las energías, y espero poder volcarlo en la cancha.

P- Que el regreso fuera tan positivo, ¿generó que ahora el público y la prensa presionen con mejores resultados?

R- El culpable de que eso pase fui yo, por cómo jugué el año anterior, por cómo me recuperé. Toda esa presión de la gente que me quiere ver bien o ganando torneos la tomo como una presión linda. Saben que puedo dar más y que tal vez hoy no lo puedo demostrar. Pero también estoy tranquilo y consciente de que hace un año y medio, esto lo veía por televisión: no podía competir, no podía jugar y sufría mucho todo lo malo que me estaba tocando. Y que en muy poco tiempo cambió de nuevo mi vida y conseguí la Copa Davis, que fue algo soñado para nuestro país durante muchísimo tiempo, con un lindo grupo que se formó. También viví una de las mejores semanas de mi vida en Río, consiguiendo otra medalla. Son cosas que no había logrado en toda mi campaña y lo logré el año último de una forma estupenda. Todavía lo pienso y me emociono. Por eso no me puedo permitir ponerme mal, cuando viví tantas cosas el año pasado y sufrí tanto queriendo volver al tenis.

P- ¿Siente que hay una relajación?

R- Sí. A mí me pone mal perder y me amarga esta situación. Pero pasa mucho que la gente te compara todo con el año pasado, con el 2009 o cuando estaba bien. O también cuando estaba mal, cuando pegaba el revés de una manera y después de otra… Entiendo que sea así, pero yo hago otro trabajo, para estar día a día cada vez mejor, para sentirme contento con lo que hago, para disfrutar de estar acá. Estoy 30 del mundo (ocupa el lugar 28) y hace un año y medio estaba mil y pico. Mucha gente lo naturaliza o lo ve como algo normal, pero no muchos pueden lograr eso. Desde (Roger) Federer hasta el que te imagines tienen altibajos, con momentos que se encuentran mejor, con momentos que se encuentran peor. Yo estoy muy feliz de poder volver a jugar al tenis, de estar en estos torneos y de venir al US Open.

P- Hay muchas bajas. ¿Se permite soñar con repetir lo de 2009?

R- Voy muy despacio, día a día. Todo el mundo sabe que es mi torneo favorito, pero la realidad marca que mi situación no es como la deseo. Pero también me agarro de que le puedo ganar a (Tomas) Berdych como lo hice en Cincinnati. Se que si el tenis se me despierta y ese hambre que tengo me acompaña, me da ilusión de hacer un buen torneo.

P- Trabajará con un entrenador, Sebastián Prieto. ¿Cuál será esa relación en este torneo?

R- Vamos a probar. Es un gran tipo. Es de un perfil bajo como a mí me gusta. No sabemos cómo puede seguir el futuro, pero para mí es importante en un torneo tan exigente encontrar una compañía, alguien que esté en la cancha conmigo, que me pueda ayudar y corregir cosas.

Delpo habló de todo, menos de la Copa Davis. El pasado domingo ratificó que no jugará el repechaje ante Kazajistán del 15 al 17 de setiembre en Astana. “Haberla ganado me deja tranquilo”, afirmó en ese momento.

El Peque jugó

bien y avanzó

Diego Schwartzman le ganó a Carlos Berlocq y avanzó a la segunda ronda del US Open.

Schwartzman se impuso a Berlocq, por 6-2, 6-1 y 6-3, y en la próxima instancia se enfrentará con el serbio Janko Tipsarevic o el australiano Thanasi Kokkinakis.

“Espero sostener el nivel, se vendrán rivales difíciles y haber ganado rápido me da confianza”, expresó Schwartzman.

Horacio Zeballos fue eliminado al perder contra el surcoreano Hyeon Chung, por 3-6, 7-6 (10/8), 6-4 y 6-3.

Hoy, Juan M. Del Potro debutará ante el suizo Henri Laaskonen, Leonardo Mayer con el galo Richard Gasquet, Guido Pella con el belga Steve Darcis y Nicolás Kicker con el alemán Cedrik Marcel Stebe.

“A mí me encantaría estar en Tokio 2020 y llegar a esos Juegos Olímpicos sano y en buen nivel. Es uno de los objetivos que me tengo a largo plazo”.

“Sufrí mucho con el tema de las lesiones. No fue un parate de vacaciones en una playa pensando en pajaritos. Fueron dos años sufriendo”.

Delpo habló de su futuro y de las lesiones que tuvo.