Mosquitos: esos visitantes molestos que se anticiparon al verano

Apenas comenzó a subir la temperatura, hicieron su molesta e inesperada aparición. Listos para ingresar hasta al último resquicio de cada casa. Listos para picar. Todavía no comenzó el verano, pero los mosquitos llegaron para quedarse, y molestar.

Las lluvias, la humedad en el ambiente y el calor que trepó en el termómetro conforman el clima ideal para que empiecen a propagarse con mayor fuerza. Ya se advierte un crecimiento importante en sus poblaciones y los expertos recomiendan “prevenir” porque algunos pueden transmitir enfermedades.

El malestar y la preocupación en diversos sectores se tradujo en pedidos de ayuda concretos: en Roca se demandó a la Municipalidad la fumigación en numerosos barrios para tratar de disminuir la cantidad de insectos.

Especialistas de la zona señalaron que las condiciones climáticas propiciaron la aparición de numerosas especies de mosquitos.

En ese marco, la eliminación de recipientes que acumulan agua y la limpieza de los entornos son la clave para reducir la reproducción de estos insectos.

Los mosquitos que proliferan en la región patagónica pertenecen a la familia de los culicidos (culex, aunque puede haber otras especies), y uno de los más comunes es el ‘culex pipiens’.

El entomólogo Eduardo Parra explicó que, normalmente, la amplitud térmica es un factor decisivo para el establecimiento de las especies, pero a raíz de los cambios en el clima, “la modificación de las temperaturas medias anuales y la modificación de los porcentajes de humedad“ propicia la adaptación de nuevas especies” y “eso favorece la aparición de otras que ya se vienen aclimatando”.

“Las poblaciones crecen porque las condiciones climáticas se están dando para que existan más individuos”, explicó Liliana Cichón, especialista del área de Sanidad del INTA Alto Valle.

No sólo el clima, también “la estabilidad de los caudales incide”. “Antes, cuando el río subía o bajaba, esto funcionaba como un tipo de control porque en algún momento quedaba seco, pero ahora es más estable y se sabe que el medio acuático es el que permite el desarrollo de estos insectos”, se indicó.

Por eso, los expertos recomendaron “hacer todo lo que esté al alcance” para evitar que haya mosquitos. Porque son vectores de enfermedades y ante una picadura hay más posibilidades de infecciones.

“Las nuevas especies son más resistentes. Para sobrevivir a las condiciones climáticas adversas se adaptan y se vuelven más resistentes”.

Eduardo Parra, entomólogo de Senasa.