Moyano contra empresarios

Moyano contra empresarios El titular de la CGT disidente, Hugo Moyano, pidió ayer que los empresarios «no se hagan los ofendidos» porque el gobierno no los consultó en la redacción del proyecto de reforma laboral, al considerar que cuando se votó esa ley «sospechada de coimas y de sobornos se hicieron los distraídos». Moyano recordó que «por protestar contra esa ley a nosotros nos cagaron a palos frente al Congreso y tuvimos que bancarnos toda clase de críticas y de amenazas de los funcionarios del gobierno de turno, mientras que los empresarios se mantenían en silencio». «Sin dudas, el proyecto modificatorio que consensuamos -con la CGT oficial y la CTA-, es lo que más se adapta a la realidad política económica y social que vivimos los argentinos», remarcó Moyano. El dirigente de los camioneros agregó que el proyecto de ley que el gobierno consensuó con los tres sectores sindicales «no sólo permite derogar una ley cuya aprobación es sospechada del pago coimas y de sobornos, sino que le permite a los trabajadores recuperar su dignidad». «Me llama a atención que estos señores empresarios se sientan ahora ofendidos y critiquen el proyecto, porque cuando se votó la ley de flexibilidad laboral que está viciada de nulidad absoluta se hicieron los distraídos y se quedaron en silencio», enfatizó. De esta forma, Moyano salió a responderle a los empresarios enrolados en la Unión Industrial Argentina (UIA), que días atrás se quejaron porque el gobierno no los tuvo en cuenta a la hora de rediseñar las relaciones laborales. El 27 de abril del 2001, día en que se votó en el Congreso la polémica ley de reforma laboral, los camioneros de Moyano realizaron una manifestación de repudio frente al Congreso donde fueron brutalmente reprimidos por la policía.  

El titular de la CGT disidente, Hugo Moyano, pidió ayer que los empresarios «no se hagan los ofendidos» porque el gobierno no los consultó en la redacción del proyecto de reforma laboral, al considerar que cuando se votó esa ley «sospechada de coimas y de sobornos se hicieron los distraídos».

Moyano recordó que «por protestar contra esa ley a nosotros nos cagaron a palos frente al Congreso y tuvimos que bancarnos toda clase de críticas y de amenazas de los funcionarios del gobierno de turno, mientras que los empresarios se mantenían en silencio».

«Sin dudas, el proyecto modificatorio que consensuamos -con la CGT oficial y la CTA-, es lo que más se adapta a la realidad política económica y social que vivimos los argentinos», remarcó Moyano.

El dirigente de los camioneros agregó que el proyecto de ley que el gobierno consensuó con los tres sectores sindicales «no sólo permite derogar una ley cuya aprobación es sospechada del pago coimas y de sobornos, sino que le permite a los trabajadores recuperar su dignidad».

«Me llama a atención que estos señores empresarios se sientan ahora ofendidos y critiquen el proyecto, porque cuando se votó la ley de flexibilidad laboral que está viciada de nulidad absoluta se hicieron los distraídos y se quedaron en silencio», enfatizó.

De esta forma, Moyano salió a responderle a los empresarios enrolados en la Unión Industrial Argentina (UIA), que días atrás se quejaron porque el gobierno no los tuvo en cuenta a la hora de rediseñar las relaciones laborales. El 27 de abril del 2001, día en que se votó en el Congreso la polémica ley de reforma laboral, los camioneros de Moyano realizaron una manifestación de repudio frente al Congreso donde fueron brutalmente reprimidos por la policía.