Moyano descargó toda su artillería
Su potente juego prevaleció sobre el talento de Guzmán.
El partido fue de un agradable desarrollo y se definió con parciales de 6-4 y 7-5, como para ratificar que la paridad en el juego fue una constante. Así el hombre de Venado Tuerto se quedó con la Copa «Banco Provincia del Neuquén» que estaba en juego.
El viento, por momentos la lluvia -obligó a la interrupción del cruce-, el cielo que tronaba, le pusieron un clima especial a esta final que fue seguida por buena cantidad de espectadores.
Todo fue muy equilibrado. En el primer set Moyano se paró firme en el fondo de la cancha y cada vez que su contrincante quiso pasar al ataque lo pasó con solvencia.
Cada punto costó definirlo, Moyano quebró el servicio en el tercero, pero Guzmán lo recuperó en el sexto. Estaban 4 a 4 y el ganador logró otra vez doblegar el servicio del rival y luego conservar el propio, para definir el primer parcial 6-4, luego de 50 minutos de juego.
Una de las complicaciones para ambos jugadores la trajo el viento, porque les costó adaptarse a los «movimientos» de la pelota. Hubo muchos errores no forzados por eso motivo.
Iban 1 a 1 en el segundo set cuando la lluvia paró las acciones. En la vuelta a la cancha, una vez que mejoró el tiempo, los dos se mostraron muy imprecisos y llegaron los quiebres en cadena.
Moyano se iba al frente y Guzmán se recuperaba al toque. Así llegaron al 5 a 5 y el hombre de Venado Tuerto no dejó pasar la chance de definirlo. Se puso 6-5, mantuvo su saque y festejó por primera vez en esta ciudad, después de animar las dos anteriores ediciones del Abierto.
Una de las claves del ganador estuvo justamente en su servicio, porque por un lado cometió muchas dobles faltas, pero el punto que cerró el encuentro fue conseguido con un ace. También en las veces en que pasó al ataque, en las que casi siempre consiguió el punto.
Moyano tendrá ahora un desafío en diez días en el torneo de San Pablo, Brasil, y después partirá a Australia para ver si puede ingresar en el primer torneo de Grand Slam del año.
Un excelente partido final entregó esta nueva edición del Abierto patagónico, que apunta a consolidarse como una cita con el buen tenis nacional.
La tercera fue la vencida
NEUQUEN (AN).- Diego Moyano tenía asistencia perfecta. Era su tercera visita para jugar el Abierto y «se me tenía que dar, por suerte fue la vencida», reconoció el santafesino en el final.
El ganador destacó «el esfuerzo de los organizadores por traer tenis a la Patagonia» y las condiciones de su vencido al expresar: «hay que tenerlo en cuenta porque es una de las esperanzas del tenis argentino».
Moyano expresó su satisfacción por la forma en que cerró el año: «estoy contento porque, pese a una lesión en el hombro, termino bien el año. Tengo motivos para arrancar con todo en el 2003».
En su tercera presencia en Neuquén, Moyano tuvo su premio. «Se me tenía que dar, la tercera era la vencida. Quiero destacar el esfuerzo de los organizadores para traer el tenis a la Patagonia, porque es complicado armar estos espectáculos».
También tuvo palabras de elogio para Guzmán: «es muy talentoso y hay que tenerlo presente porque es una de las esperanzas del tenis argentino».
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