A Uruguay se le tapó el mate

Lo de Francia en este Mundial es un monumento a la eficacia y el pragmatismo. Les Bleus llegaron dos veces ante Uruguay y fue suficiente para marcar un 2-0 al rojo vivo en la ilusión charrúa.

Varane y Griezmann fueron los encargados de asestarle el último golpe a la Celeste, que se despidió de un Mundial en el que podría haber llegado un poco más lejos si la suerte los hubiera acompañado.

Desde el inicio, Uruguay plantea un juego más físico, con roce constante para parar la velocidad extrema de Francia. Lejos de achicarse, el elenco europeo se mostró predispuesto al choque y no regaló ni un centímetro en la lucha por el terreno.

En ese mismo sentido, los galos se mostraban más adelantados en cancha, pero la Celeste advertía siempre de contraataque.

Pese a la creciente intensidad en el roce, a la hora de jugar las ideas se dispersaban y faltaba generación. La muestra fue la primera media hora: muchísimas faltas y apenas una chance, un cabezazo de Mbappé que se marchó por arriba del travesaño después de que la pelota le quedó servida en el área.

Recién a los 40’ llegó el quiebre en el marcador. Tras una innecesaria falta de Bentancur en el borde del área, llegó un centro de tiro libre a la cabeza de Varane, que la puso contra el palo derecho de Muslera y firmó el 1-0.

Parecía que Uruguay acusaría el golpe, pero la Celeste planteó una réplica inmediata. Sin embargo apareció Lloris para taparle un clarísimo cabezazo a Cáceres, en una de las grandes atajadas del Mundial.

Para el complemento se jugó aún peor, pero Francia siempre fue la que mostró claridad, aún ante el ímpetu charrúa. Fue allí que Griezmann se cargó el equipo al hombro y manejó los tiempos a su gusto, demostrando la jerarquía que tiene en el Atlético Madrid.

Sobre el cuarto de hora, el mismo Griezmann tiró una bomba de afuera, que encontró una floja respuesta de Muslera y se metió para decretar el 2-0. En ese preciso instante, Francia liquidó todo.

No alcanzó con el empuje en el tramo final. Los galos ganaron porque fueron prácticos. Pegaron cuando hubo que pegar, festejaron cuando se les presentó la chance y están en semifinales. Y la ilusión sigue creciendo.

La efectividad de

Francia, un lujo

Antes del entretiempo, Lloris le tapó un claro cabezazo a Cáceres que pudo haber cambiado la historia. Junto al inglés Pickford, el uno de Francia es sorpresa.

partidos dirigió Tabárez en Mundiales como técnico de Uruguay. Sólo fue superado por el alemán Helmut Schön (25). ¿Seguirá en el cargo?