Música al alcance de la mano en la escuela pública

Alfredo Leiva

SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- Los adolescentes de esta ciudad con inclinación o vocación musical, pueden cursar un bachillerato especial y recibir educación curricular tradicional, complementada con otra sistemática en música, con contenidos que serán certificados a nivel nacional y permitirán que los egresados continúen estudios terciarios o universitarios.

Antes, muchos jóvenes resignaban su vocación, obligados por la necesidad de encontrar una rápida salida laboral y el consecuente y urgente ingreso económico, pero la realidad indica que tampoco las carreras tradicionales aseguran al alumno un puesto de trabajo ni un salario razonable.

El Bachillerato Artístico con opción en Música fue creado por el Consejo Provincial de Educación de esta provincia para ser aplicado a una división del CEM 45 desde comienzos de este año, cristalizando el proyecto que presentó su director, Andrés Jan, y el anhelo de muchos adolescentes que antes debían trasladarse a otra ciudad o complementar sus estudios en institutos privados.

El cuerpo de docentes encargado de la formación y entrenamiento musical de los alumnos fue cubierto mediante concurso de antecedentes y oposición, por orden de mérito y con la evaluación de un jurado compuesto especialmente para la ocasión, y el nuevo bachillerato funciona con óptimos resultados.

La elección de esta opción implica para los alumnos un esfuerzo extra, porque después de asistir a las clases tradicionales, por la tarde o a contraturno, deberán cursar varias materias más. En primer año cursan Apreciación Musical, Elementos Técnicos de la Música, Práctica Coral, Conjuntos Instrumentales e Instrumentos, y tienen a su disposición teclados, guitarras, violines, violas y violonchelos. En los años siguientes les irán agregando materias relacionadas, y otros instrumentos para la práctica, hasta completar una educación musical plena. El entusiasmo de los alumnos y sus avances también estimularon a sus padres, y hoy la mitad de los adolescentes que cursan este bachillerato cuentan con un instrumento propio en su domicilio.

La propuesta implica una oportunidad importante para los alumnos que proceden de hogares humildes, porque de los 31 que iniciaron el año sólo dos provienen de escuelas privadas de esta ciudad, y otro de una de Mar del Plata. El espíritu de creación del nuevo instituto, además, hace que el ingreso se realice por sorteo en caso de que el número de postulantes exceda las vacantes, situación muy probable para el año próximo. Los directivos no buscan masificar la elección, pero tampoco exigen un examen de nociones básicas de lenguaje musical para ingresar al Bachillerato Artístico. “La idea es privilegiar la vocación, y brindarles en la escuela los conocimientos y los elementos necesarios para su formación”, justificó el profesor Jan, que desde hace 23 años conduce el Coro Niños y Jóvenes Cantores de Bariloche. Jan explicó que la elección de los instrumentos por parte de la escuela obedece en buena parte a su costo, porque “un violín de estudio cuesta 400 pesos, y preferimos tenerlos en mayor cantidad, y no muy pocas trompetas, clarinetes o un timbal”. También ponderó la conducta de los alumnos, respecto a que “ningún instrumento resultó averiado en todo el año”, y señaló que alguno podría llegar a repetir el año por sus notas en las materias tradicionales, pero no registran aplazos en la formación musical.