Muy poca imaginación

El gobierno perdió la brújula en el problema de la carne.

Ayer, con gran expectativa se esperaban los anuncios de Felisa Miceli sobre el Plan Ganadero. Pero fue todo muy pobre.

Solo promesas de créditos disponibles a través del Banco Nación y cambios en la tipificación del comercio interno de la carne. Lo mismo que señalaba el informe elaborado por la Sociedad Rural Argentina presentado al gobierno hace más de un año.

Kirchner respondió a esto decretando el cierre de las exportaciones de carne para presionar a la baja de precios internos.

El resultado está a la vista. El remedio oficial es mucho peor que la enfermedad del mercado.