Nalbandian se despidió del abierto de Estados Unidos

El argentino cayó por 6-2, 3-6, 6-3 y 6-2 frente al español Fernando Verdasco, número ocho del mundo.

Una de las claves del encuentro estuvo en la gran cantidad de errores no forzados cometidos por el argentino (63 contra 45 de su rival), mientras que el español lo superó en los tiros ganadores (35 contra 24).

Además, el cordobés tuvo un pésimo día con su saque con el que apenas ganó el 56 por ciento de los puntos jugados con su primer servicio y el 49 con el segundo, totalizando cinco aces y nueve doble faltas.

Verdasco, en cambio, ganó el 79 por ciento de los puntos con su primer saque y sumó 13 aces contra sólo cuatro doble faltas.

El partido arrancó sumamente parejo, con Nalbandian con problemas para conservar su saque y con mucha paridad en los games jugados.

Una clara muestra de ello es que los tres primeros games (2-1 arriba Nalbandian) demandaron 24 minutos de juego.

En el quinto juego, Verdasco pudo aprovechar su octava posibilidad de quiebre y se quedó con un game fundamental, ya que se colocó 3-2 adelante en un momento en el que era superior al cordobés.

A partir de ese momento, el español se hizo absoluto dominador del encuentro y con una mayor movilidad y velocidad de piernas que el unquillense se fue llevando un game tras otro.

Nalbandian volvió a resignar su saque, esta vez sin ganar ningún punto, y en el juego siguiente, Verdasco selló el primer set con un contundente 6-2.

En el comienzo del segundo parcial, Nalbandian aprovechó su primera oportunidad de quiebre sobre el servicio del español y se adelantó 2-0.

No obstante, el argentino no tuvo el mejor día con su saque y otra vez volvió a perder su servicio en el tercero juego.

El cordobés insistía con su mejor golpe -el revés cruzado- pero éste le caía a la perfección a Verdasco, que es zurdo, porque la pelota le quedaba en su derecha y con ella castigaba a una de las dos puntas para vencer la defensa del argentino.

Pero Nalbandian supo cambiar a tiempo, dejó de jugar tanto cruzado y comenzó a lastimar con su revés paralelo, justamente sobre el revés del español.

Así llegó un crucial quiebre en el octavo juego y un game más tarde se llevó el segundo set al conservar su saque.

En el tercer parcial, Verdascó volvió a tomar las riendas del cotejo, dejó cometer errores no forzados y se hizo claro dominador del encuentro.

Con un drive muy picante y un saque que le funcionó a la perfección, el español volvió a tomar confianza y tras un quiebre en el octavo juego, sacó la luz de ventaja para llevarse el tercer parcial.

El argentino volvió a lucir muy estático, erró muchas pelotas fáciles y siguió con grandes problemas con su saque, especialmente con el segundo con el que tuvo un magro porcentaje de 46 por ciento de puntos ganados.

En cambio, el español sumó 11 aces y tuvo una efectividad del 93 por ciento con los puntos jugados sobre su primer servicio.

El español continuó con su ritmo demoledor en el cuarto set y ya en el tercer juego le quebró el saque al cordobés para adelantarse 2-1.

Apoyado en un excelente estado físico y un drive que lastimó y mucho a Nalbandian, Verdasco volvió a quebrar en el quinto juego y se adelantó 4-1.

Con un Nalbandian agotado por el calor y por el trajín del partido, Verdasco se limitó a conservar su saque para llevarse un triunfo merecido, que lo ubica en los octavos de final del último Grand Slam del año.

Verdasco jugará en esa instancia contra el también español David Ferrer (12), quien hoy eliminó a su compatriota Daniel Gimeno Traver (59) por 7-6 (7-2), 6-2 y 6-2.

Télam


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