Neuquén-Plottier tiene 13.500 personas subocupadas
Constituyen el 12% de los que están en condiciones de trabajar
NEUQUEN (AN).- Una mujer menor de 35 años, con estudios secundarios -en su mayoría incompletos-, sin marido y con hijos, es la imagen más representativa de las 13.500 personas que en esta capital y Plottier tienen jornadas laborales reducidas o perciben un subsidio de desempleo. Esa porción equivale al 12 por ciento de gente en condiciones de trabajar que está actualmente subocupada, de acuerdo con las cifras que lanzó ayer el ministro de Desarrollo Social, Jorge Lara.
Aun sin contar con las cifras oficiales que se darán a conocer mañana, los datos disponibles permitían estimar que si se incluyese a la población del interior -urbana y rural- en esa franja, el total de subocupados en la provincial llegaría a los 25.700.
Los cálculos más conservadores permiten establecer que casi tres personas por día perdieron en la reciente década su estabilidad en el mercado laboral. En ese período, unos 10.067 habitantes del principal centro urbano de esta provincia -a razón de mil por año-, se vieron impelidos a reducir su horario laboral, a renunciar a su trabajo permanente y sustituirlo por otro temporario, o se dedicaron a las changas y comenzaron a engrosar las listas de los programas Trabajar, Servicios comunitarios o ley provincial 2128.
De acuerdo con la Encuesta Permanente de Hogares que realiza semestralmente el Indec -Instituto Nacional de Estadística y Censos- en el conglomerado Neuquén-Plottier, la población económicamente activa -PEA- en octubre pasado era de 112.248 personas, sobre la base de un total de 266.574 habitantes en ese área. En octubre de 1990, la subocupación, que incluye a los que trabajan menos de 35 horas semanales y quisieran una jornada laboral más prolongada y mejor paga, afectaba a 3.433 neuquinos -un 5,2 por ciento de la PEA local- pero el año pasado llegó al 13,2 por ciento, es decir a unos 14.800.
En 1999, según mediciones de la subsecretaría de Acción Social, luego de finalizar sus estudios secundarios, se incorporaron siete mil jóvenes a la población económicamente activa y comenzaron a ocupar puestos de trabajo, los empleados públicos que cesaron sus funciones con la asunción de las nuevas autoridades, la caída de los programas nacionales de empleo -Trabajar, Servicios Comunitarios, Forestar- y fondo de asistencia ocupacional -o Focao, ley 2128-. En conjunto, en todos los programas, hay un padrón que a finales de diciembre pasado era de 12.500 beneficiarios. En la actualidad, los planes nacionales se redujeron a mil subsidiados.
La precarización del empleo, la reducción de las jornadas laborales y las restricciones presupuestarias -esto último en ámbitos oficiales- afectaron también a los empleados de la administración pública provincial o municipal, cuyos horarios fueron disminuidos y no encuentran otra tarea remunerada. El proyecto de ley de emergencia económica de Jorge Sobisch suponía establecer un régimen de cinco horas en la administración central -ahora se trabajan siete horas diarias- y abonar el equivalente a seis horas.
Por lo tanto, en la actualidad, seis de cada diez subocupados son mujeres que tienen instrucción primaria completa o secundario completo.
La mayor presión
NEUQUEN (AN).- Aunque la desocupación alcanza proporciones mayores en localidades pequeñas o en zonas rurales, la presión «es mayor en los principales centros urbanos» de la provincia, dijo ayer el subsecretario de Acción Social, Eduardo Martínez.
El funcionario indicó que en la zona de Confluencia -la capital y Plottier y Centenario- y Cutral Co y Zapala concentran los principales niveles de conflicto. El lunes, el gobernador Jorge Sobisch dijo que la desocupación en Neuquén trepó al 17 por ciento, pero la información no pudo ser confirmada porque los datos por provincia se difunden después que lo hace el Indec, de acuerdo con los compromisos vigentes.
Sobisch dijo que durante los siete meses de gobierno se redoblaron los esfuerzos para contener el conflicto social mediante los programas de asistencia. En ese punto, Martínez aseguró que desde su cartera se atienden once mil comedores comunitarios en la provincia que demandan unos 200 mil pesos mensuales en total de inversión.
NEUQUEN (AN).- Una mujer menor de 35 años, con estudios secundarios -en su mayoría incompletos-, sin marido y con hijos, es la imagen más representativa de las 13.500 personas que en esta capital y Plottier tienen jornadas laborales reducidas o perciben un subsidio de desempleo. Esa porción equivale al 12 por ciento de gente en condiciones de trabajar que está actualmente subocupada, de acuerdo con las cifras que lanzó ayer el ministro de Desarrollo Social, Jorge Lara.
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