Fue dos cuadras en llantas y en contramano para evitar un control de alcoholemia

Por evitar un control de alcoholemia un conductor neuquino de 23 años manejó dos cuadras en contramano y cuando lo detuvieron tenía tres de sus cuatro ruedas en llanta, aparentemente había chocado el cordón cuneta. Cuando le realizaron la prueba de aliento etílico le dio el registro más alto del fin de semana, con 2,11 gramos de alcohol por litro de sangre.

Es el segundo fin de semana consecutivo que los inspectores de tránsito de la comuna y de la Policía se encuentran con situaciones descabelladas en las calles neuquinas. La semana pasada el turno había sido para un joven que se quedó dormido en medio de la calle mientras esperaba un semáforo en el barrio La Sirena.

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El director de Tránsito de la municipalidad, Facundo Churrarín, indicó en declaraciones radiales que el hecho se registró el domingo alredor de las 6:30 en pleno centro.

Aseguró se había montado un operativo de control en inmediaciones de la Casa de Gobierno y el joven que circulaba en una Ford Ranger, quien circulaba por calle Roca, al llegar a la esquina de Brown, hizo marcha atrás, giró el vehículo y emprendió la fuga en contra mano por dos cuadras hasta la Avenida Argentina, y allí giró al sur pero fue interceptado en la esquina de Carlos H. Rodríguez por un patrullero de la comisaría Primera que se encontraba en el lugar.

Cuando lo detuvieron tenía tres ruedas desinfladas y por lo que pudieron notar los inspectores, dos de las cubiertas tenían marcas que indicaban que el joven había chocado contra algún cordón cuneta. En ese lugar se le labró el acta de infracción y luego el muchacho se comunicó con su padre, quien finalmente llamó a una grúa para retirar el rodado.

Otro hecho llamativo ocurrió el sábado en la madrugada en la esquina de Elordi y Bouquet Roldán donde la policía retuvo un vehículo con varias personas, cuando le efectuaron el control de alcoholemia al conductor arrojó resultados positivos con 0,89 gramos de alcohol en sangre. Pero lo curioso del caso fue que mientras le realizaban la infracción, uno de sus acompañantes seguía consumiendo alcohol frente a los inspectores.

Churrarín explicó que los policías que estaban en el lugar advirtieron en reiteradas oportunidades a esta persona para que deje de consumir bebidas en la vía pública, porque está prohibido, pero ante la persistencia del sujeto fue detenido.

El funcionario agregó que durante el fin de semana hubo 29 casos positivos de alcohol en sangre y que se secuestraron 20 vehículos en total. Se trabajó en conjunto con la comisarías Primera y Segunda, y con Gendarmería Nacional.