La capital ampliará su red de guardianes ambientales

La ciudad de Neuquén ampliará su “guardia ambiental”. Al dispositivo de medición de la calidad del agua que se instaló en la desembocadura del arroyo Durán, se sumarán otros tres más que registrarán la polución del aire, los rayos UV y la contaminación sonora. El proyecto demandará una inversión total de 2.270.000 pesos que serán aportados por el Consejo Federal de Ciencia y Tecnología y por el municipio de Neuquén.

Los datos obtenidos del monitoreo ambiental se buscará aplicar políticas de educación y concientización sobre el cuidado del ambiente, aunque los usos de esta información son potencialmente mayores, ya que la propuesta incluye la creación de un soporte web y una aplicación de celular para que la misma esté disponible para todos los vecinos.

La idea fue diseñada por el municipio en 2017 y avalada por el Copade como autoridad provincial de Ciencia y Tecnología responsable de presentar los proyectos ante el Consejo Federal de Ciencia y Tecnología (Cofecyt). Este organismo aprobó la propuesta y le destinó $1.588.000 de los 2.270.000 que se precisan para la puesta en marcha. Los 682.000 restantes saldrán de las arcas municipales.

El próximo paso será la firma del convenio de subvención para que el Cofecyt envíe el primer desembolso de dinero. Por su parte, el Ejecutivo municipal ya implementó, en febrero de este año, una estación de monitoreo en la desembocadura del arroyo Durán. Los sensores miden la temperatura, PH, oxígeno disuelto, potencial oxidación, reducción y conductividad del agua del río, variables que permiten sacar conclusiones sobre la condición de la misma.

Además habilitó un acceso web a través de su página oficial donde los vecinos de la ciudad pueden disponer de los datos sobre la calidad del agua del Limay.

Este proyecto se ejecutará de t res etapas. El primer paso será la construcción de la infraestructura para el sostenimiento de la red de comunicaciones y de sitios de muestreo.

Posteriormente se desarrollará una estación ambiental y la puesta en funcionamiento de la red de monitoreo, montaje, instalación y puesta en marcha de las estaciones desde donde se medirá la contaminación del aire y la sonora.

Luego se diseñarán y aplicarán campañas de educación ambiental abierta a toda la comunidad.

Esta experiencia se intentará extender a otros municipios de la Confluencia, a través del Consejo Federal de Ciencia y Tecnología.

El proyecto fue diseñado por el Ejecutivo en el 2017 y avalada por el Copade, autoridad encargada de presentar proyectos ante Nación.