Newell»s forzó el cuarto juego con el «Depo»

La gran tarea de Del Sol y Hoya fue clave en la formación rosarina

Un triunfo clasifica al «Depo» para otra serie 7-4-00 [nota]

La gente casi llenó el polideportivo esperando una fiesta. El estadio se colmó como nunca en estas noches de básquet del Torneo Nacional de Ascenso. Pero el hincha debió resignarse a otra oportunidad.

Anoche Newell»s jugó la «heróica» y con un desempeño notable de algunos de sus jugadores -Del Sol, Hoya y algo de Mc Maham- se impuso a Deportivo Roca por 88 a 77 (41-37) y la serie de play-offs de octavos de final, que se redujo a 2-1 para los naranjas continuará mañana, en el mismo escenario, con tanta o mayor tensión.

Una victoria rojinegra sin objeciones, porque con poco se bastó para ser superior a un equipo local que no pudo encontrar su juego de conjunto. Y así le fue.

Mario Guzmán, el DT de Newell»s, ideó un libreto con la única fórmula que le quedaba «con vida». Jugado por jugado, apostó con Del Sol y de movida se vio que su presencia era determinante en el equipo. El base ordenó de un trabajo que desde el arranque se hizo por demás efectivo, ya sea con asistencias y una tarea casi indetenible de Hoya y Mc Maham. Así, la visita se puso adelante desde el arranque, con un aprovechamiento bastante equilibrado en los porcentajes de tiros cortos y largos.

La cuestión era simple en la formación rosarina. Mover la pelota y esperar que alguno se cruzase por la pintura para marcar el desequilibrio. Cuando esa vía se cerraba, aparecía el perímetro, casi letal.

El técnico visitante acomodó las piezas según la condición física de Del Sol. Cuando sacaba alguna buena diferencia -en el primer tiempo la máxima llegó a ser de nueve puntos (41-32 a dos minutos del descanso)- retiró resguardó al base en el banco y «entre algodones».

Al «Depo» se le hizo cuesta arriba. Demasiada pesada era la pendiente. En primer lugar, porque la defensa exhibía flancos bastante descubiertos -por eso intentó Spada con Guaita y D»Alessandro, mientras que en ataque sólo era Collie el que conseguía acertar desde corta distancia, pero muy de vez en cuando.

Para colmo, los intentos de larga distancia traducían un porcentaje muy magro (4-15 en la primera etapa) y sólo Mázzaro lograba ir estirando su casillero para evitar que la brecha se estirara y cerrar una etapa con un tanteador generoso para el local, de apenas cuatro puntos abajo.

Hasta que llegó el tercer cuarto y ahí sí «explotaron» dos protagonistas excluyentes: Hoya y Jones. Los 13 puntos del primero y los 6 que convirtió su compañero en ese tramo de diez minutos comenzaron a acentuar el perfil de definición que parecía ya inclinar el partido.

Roca se había desesperado tanto que por momentos cada uno quería ser el salvador de todos. Y con eso no se hizo más que profundizar el desorden ante un equipo como este de Newell»s que resistió colos desesperados embates locales del final, haciendo circular la pelota hasta asegurarse una victoria que lo repone anímicamente.

Mañana será otro capítulo de esta historia. El cuarto. Aún Roca está adelante, pero el 2-1.


Formá parte de nuestra comunidad de lectores

Más de un siglo comprometidos con nuestra comunidad. Elegí la mejor información, análisis y entretenimiento, desde la Patagonia para todo el país.

Quiero mi suscripción

Comentarios