No cede la tensión entre ladrilleros y horneros de Allen

Diego von Sprecher

Representantes de la Unión Obrera Ladrillera y de la CGT intervinieron en el conflicto.

ALLEN (AA).- El conflicto que se desató en Allen entre los cargadores de ladrillos y los horneros suma tensión. Los cargadores ya están bajo el ala del sindicato del ladrillo a nivel nacional y nombraron a un colaborador gremial en la provincia. Los horneros estarían pensando en dejar de contratar mano de obra local y podrían parar la actividad como respuesta. Mientras tanto, la Secretaría de Trabajo sigue inspeccionando los campamentos. En las últimas horas Jorge Alonso, delegado normalizador de la Unión Obrera Ladrillera de la República Argentina (Uolra), estuvo en Allen y se reunió con los cargadores locales y con el líder de la CGT rionegrina, Rubén Belich. Alonso, quien llegó desde Buenos Aires, participó en cinco inspecciones que se llevaron adelante en las tierras que el productor minero Hércules Impiccini cedió mediante “particulares comodatos” a distintos horneros. El delegado de la Uolra aseguró que los obreros del ladrillo trabajan en condiciones de total irregularidad y junto con Belich acordó el nombramiento de un colaborador gremial en la provincia, el cargador allense Roberto Rojas. El sábado por la mañana los cargadores, con Rojas a la cabeza, realizaron una rueda de prensa y aseguraron que a nivel nacional existe un convenio y una escala salarial homologados por el Ministerio de Trabajo pero que en Allen nunca se aplicaron. “El balance de los pasos que dimos en estos días es muy positivo. A partir del lunes vamos a empezar a trabajar con los ladrilleros, informándoles cuáles serán las contemplaciones que van a tener para regularizar sus situaciones. Alonso pudo ver el trabajo en negro e infrahumano que existe en los hornos. De a poco vamos a tratar de erradicar el trabajo esclavo y en negro”, afirmó Rojas.