No hay puente y ya ofrecen lotes en la margen sur

Miguel Gambera

Diego Von Sprecher

dievon@hotmail.com

María Luján Venier

mlvenier@rionegro.com.ar

CIPOLLETTI (AC/AA).- Cuando se habilite el puente que la provincia construye sobre el río Negro en Cipolletti miles de hectáreas sobre la margen sur quedarán a un paso de la ciudad. El anuncio del reinicio de las obras reactivó un movimiento irregular con compra-venta de tierras que, aunque se intente disimular, existe.

A los puestos ubicados, sobre todo a lo largo de la costa del río, llegan frecuentemente personas interesadas en comprar tierras y cualquiera que recorra la zona podrá advertir que existen lotes donde se han edificado algunas construcciones. Aunque de manera incipiente también se pueden observar parcelas con estacas y carteles que indican la titularidad.

Mientras, el municipio cipoleño impulsa un proyecto de largo aliento sobre 100.000 de las 500.000 hectáreas que pertenecen al ejido de la ciudad sobre la margen sur. El área abarca una franja a lo largo de los ríos Limay y Negro de aproximadamente 220 kilómetros, entre Arroyito y la Isla Jordán. El 40% del territorio corresponde al Área Natural Protegida Valle Cretácico, aprobada por ley provincial.

La iniciativa denominada de “Desarrollo multipropósito productivo y territorial Barrial Colorado margen sur del río Negro”, busca lograr alternativas de desarrollo programado y armónico del sector.

El horizonte del programa, que ideó un grupo de expertos, es de 30 años. Prevén que en ese lapso el actual casco urbano de la ciudad habrá superado largamente la capacidad de tierras para albergar a una población que habrá duplicado a la actual, según explicó el titular de la Unidad de Gestión de la Margen Sur de la municipalidad, Aarón Fainberg.

En el corto plazo no hay legislación que garantice este “desarrollo armónico” de las tierras que, en un 90% son privadas ya sea porque tienen ocupantes históricos o propietarios legalmente reconocidos.

Es la situación de Andrés Jáureguy. Durante un acuerdo judicial, a fines de 2009, se le reconocieron como propias cerca de 500 hectáreas aunque luego la decisión fue cuestionada por los copropietarios del campo. A pesar de esto su idea es llevar adelante una serie de proyectos (ver aparte).

El año pasado, el Concejo Deliberante -a pedido del gobierno municipal- prohibió todo tipo de fraccionamiento del suelo y la obligatoriedad de requerir el acuerdo de la municipalidad para cualquier ducto que se decida construir en la zona.

Según Fainberg, la situación se mantendrá hasta que los concejales aprueben una ordenanza que establezca el uso que se le dará a todas esas tierras. Explicó que se está trabajando en la normativa que tendrá como eje al proyecto Barrial Colorado.

Aunque todos los funcionarios consultados aseguraron que cualquier compra-venta de tierras fraccionadas “es ilegal”, han circulado cadenas de mail mediante la que ofrecen lotes en la margen sur.

“Río Negro” contactó a algunas personas que decidieron aceptar el ofrecimiento vía internet. Ninguno de los que concretó la operación posee título de propiedad ni escritura del terreno, sólo la cesión de derechos y la promesa de que la situación dominial se solucionará en poco tiempo.