Nuevos ataques en Irak

En medio de creciente tensión política, se produjo ayer el atentado más grave en Irak contra tropas norteamericanas desde agosto de 2005.

El ataque insurgente perpetrado la noche del lunes en Diyala, noreste de Bagdad, que dejó nueve soldados estadounidenses muertos, fue reivindicado por la organización terrorista Al Qaeda en un mensaje a la cadena Al Arabiya. El atentado causó además heridas a otros 20 soldados estadounidenses y a un civil iraquí. Quince soldados pudieron reincorporarse al servicio después de ser atendidos.

Un atentado con coche bomba en el bastión rebelde de Ramadi, en el oeste de Irak, causó la muerte de 25 personas y dejó unos 25 heridos, informó la cadena de televisión Al Arabiya. En otros atentados, al menos ocho iraquíes murieron y 15 resultaron heridos tras el bombardeo de un mercado en el sur de Bagdad con granadas de mortero. Dos iraquíes murieron al estallar en el este de Bagdad una bomba colocada en un autobús.