Olimpo y All Boys no saben cómo ganar

Olimpo debió ganarle a All Boys, pero al final se conformó con el 1-1, y así no sólo sigue sin conseguir su primera victoria en el Torneo Inicial, algo que también le sucede al conjunto de Floresta, sino que se mantiene en el último lugar de la tabla de los promedios. All Boys terminó el partido con un hombre menos por la expulsión de Carlos Soto, a los 36 minutos del segundo tiempo, tras recibir la segunda tarjeta amarilla por pegarle una patada a Lugüercio. El Albo fue el dueño de las acciones en el arranque del juego y eso se vio reflejado con el 1-0 obtenido a los 13 minutos por Ferrari, quien empujó sobre la línea un toque de Mauro Matos que se metía dentro del arco. Después todo fue de Olimpo, que creció a través del trabajo que realizó Martín Pérez Guede por izquierda. Pudieron los bahienses haber alcanzado la igualdad rápidamente, pero Nicolás Cambiasso envió al córner un cabezazo de Iván Furios (18 minutos) y, poco después, un intento de Damián Musto se estrelló contra el palo derecho. La paridad en el tanteador recién llegó a los 34, con un gol que la gente de All Boys reclamó. Hubo un centro desde la derecha, Cambiasso fue a buscar la pelota, chocó con Vuletich y la perdió, y el delantero, en una rápida reacción, la empujó al fondo de la red. En el principio de la etapa final , All Boys, con muy poco, fue el que dominó y pudo marcar, a los 20, a través de un contraataque que Maxi Núñez no definió con precisión. Olimpo volvió a hacerse dueños de las acciones, pero careció de claridad, corrió mucho y su única vía de llegada fueron los centros, neutralizados generalmente por los defensores. Pero a pesar de eso Olimpo en los últimos quince minutos pudo haber marcado el tanto que le diera la victoria que mereció, ya que tuvo tres ocasiones para concretarlo. A los 30, un cabezazo de Pérez Guedes salió pegado al poste izquierdo; a los 41, un remate de Paulo Rosales fue rechazado sobre la línea por Ferrari y, a los 45, otro cabezazo, esta vez de Néstor Moiraghi, fue despejado en la línea por Alejandro Gagliardi.