Otro golpe de boqueteros a un supermercado en Neuquén capital

Con una planificación que cuidó todos los detalles un grupo de boqueteros robó 661.000 pesos del supermercado Vea, de 12 de Septiembre y Láinez en el Bajo de la ciudad, el fin de semana. El dinero lo sacaron de una de las dos cajas fuertes que están en el sector de las oficinas, en un primer piso, a la que violentaron según estiman los investigadores con un amoladora.

“Todo indica que el o los autores tenían un acabado conocimiento del lugar, porque se cuidaron de evitar que los registraron las cámaras de seguridad en un primer momento y luego las desconectaron”, dijo el comisario inspector Oscar Montecino, coordinador de la zona oeste del Departamento Delitos de la Policía de Neuquén.

El dato relevante de esta alternativa del atraco es que, según se supo, en el centro de monitoreo de la cadena de sucursales de la firma, que está en Mendoza capital, se detectó algún hecho, aunque no se precisó qué había ocurrido.

Eso sucedió alrededor de las 4 del domingo y el gerente de la sucursal Neuquén fue notificado del incidente.

El directivo concurrió al edificio, que está en pleno centro, hizo una observación ocular de la parte exterior y no advirtió ninguna anormalidad.

Siguiendo los protocolos de seguridad de la firma para este tipo de situaciones el gerente no ingresó al salón, de acuerdo a datos aportados por los investigadores.

Ayer se intentó dialogar con los responsables de la sucursal, pero el personal de seguridad informó que no se encontraban en el local y debía consultarse hoy.

La forma en que ingresaron los delincuentes marca singular parecido con al menos algunos de otros robos de boqueteros en esta ciudad en los últimos tiempos.

“Se está trabajando para establecer, si las hay, líneas comunes en otros hechos registrados últimamente”, respondió ante la pregunta Montecino.

Se presume que los ladrones ingresaron por un predio que da a la calle Leguizamón, opuesta a la de ingreso del local, que es por Láinez. Pero habrían accedido por la lateral, 12 de Septiembre. Alo largo de los cien metros de esta cuadra, del lado opuesto funciona la feria, con decenas de locales de diversos rubros.

Una vez en el interior, a través de dos viviendas deshabitadas, accedieron al techo parabólico de chapas de cinc del comercio e hicieron tres boquetes, de unos 40 por 50 centímetros. Descartaron hacerlo por una puerta que tiene alarma lo que, entre otros elementos, evidencia que conocían todos los detalles.

Se deslizaron y llegaron a las oficinas de un primer piso. De ahí, para evitar ser captados por el sistema de seguridad, hicieron boquetes de unos 30 por 30 centímetros en paredes de durlock de los boxes, hasta llegar donde estás las cajas fuertes.

Sólo una pudieron vulnerar, por la parte posterior y, aparentemente con una amoladora, hicieron un pequeño agujero para meter la mano y tomar los billetes. Guardaba recaudación del jueves al sábado, día último de atención al público.

La otra caja permaneció intacta y no se sabe si tenía dinero u otros valores.

Abandonaron el lugar haciendo el mismo recorrido por donde ingresaron.

Marcada similitud

con otros hechos

En la mañana del lunes 29 de febrero pasado los empleados de Muebles Díaz, de Perito Moreno casi Río Negro, centro neurálgico del microcentro comercial del Bajo de Neuquén capital, advirtieron que habían ingresado ladrones.

Casi idéntica fue la modalizada usada en el robo ocurrido en Vea el domingo: hicieron un boquete en el techo de chapas, justo donde están las oficinas, en un primer piso, de manera que descendieron apenas un par de metros.

En ese caso ocurrido a principios de año fueron directo a donde estaban los artículos que, se presume, fueron a buscar.

No se informó que se hubieran llevado dinero.

Se alzaron con 60 celulares, 30 tablets, 20 notebook y cámaras digitales.

Los ladrones se fueron por el lugar por donde habían ingresado.

De madrugada