Paddon se metió en el club de los ganadores
Raúl Bernal rbernal@rionegro.com.ar
Redacción central
“Este chaval tiene pasta de campeón”, afirmó Dani Sordo. Estaba hablando de Hayden Paddon, uno de sus compañeros en el equipo Hyundai. Ayer, el neozelandés se metió en la historia grande, reservada sólo a los elegidos, del Rally de la República Argentina.
Paddon logró la primera victoria de su campaña nada menos que en una de las más pruebas emblemáticas del Mundial, tanto por la exigencia de los caminos de las serranías cordobesas como por la pasión de los aficionados.
Todos los esfuerzos que hizo desde muy joven para ser piloto de rally tuvieron su premio ayer en el Power Stage de El Cóndor, donde selló su victoria después de una dura lucha con el tricampeón, el francés Sebastien Ogier, en la última etapa de la prueba.
Después de semejante conquista, Paddon puede sentirse como un héroe, después de todo lo que pasó hasta asegurarse un contrato por tres años con el equipo Hyundai.
Hace justo un año, en Córdoba, vivió una situación dramático cuando su auto desbocado se fue encima del público. Pisó el freno y evitó una tragedia.
Ahora, en un momento de gloria, no habló de revancha y sólo reconoció, después de bajar del techo de su Hyundai, que dio resultado tanto trabajo.
Paddon mostró el poderío de su auto en el shakedown, pero muchos pensaron que estuvo adelante porque los principales candidatos no mostraron todo.
Las acciones de Paddon comenzaron a subir el pasado viernes en la primera etapa, cuando le planteó lucha de igual a igual tanto al finés Jari-Matti Latvala como a Ogier.
Es más, en la segunda etapa fue el único que le siguió el ritmo a Latvala, hasta que el finés cometió un grosero error y dio unos cuantos tumbos.
Paddon asumió el liderazgo, pero aún quedaba una etapa por delante en los míticos caminos de Altas Cubres y con Ogier dispuesto a acelerar todo.
Lo demostró en el primer tramo, El Cóndor-Copina, donde le descontó siete segundos y quedó a 22s 9/10 en la general.
Ogier voló en Mina Clavero-Giulio Césare, para sacarle 19s 8/10. Increíble, pero cierto, el ganador se iba a definir en el Power Stage de El Cóndor.
Con sólo 2s 6/10 a favor de Paddon encararon los últimos 16,32 kilómetros. Los dos entregaron todo. Ogier hasta bajó desparramado, arriesgando al extremo.
Atrás aceleró Paddon, con la maestría de los grandes para manejar en situación límite, bajó ¡¡¡53 segundos!!! su tiempo de la primera pasada y selló la victoria, que lo metió en el selecto grupo de los ganadores del Rally de Argentina.
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